El Valle de Punilla es el más conocido de la provincia y la ruta nacional 38 es una especie de columna vertebral a la vera de la cual se levantan poblaciones turísticas con diversas propuestas..
Ideal para paladear de manera anticipada las vacaciones veraniegas es oportuna una escapada de fin de semana ya que son aproximadamente 36 kilómetros por autovía los que separan a la capital provincial de Villa Carlos Paz, considerada el Portal de Punilla.
El lago San Roque tiene gran protagonismo y es sobre su costa donde se asienta la villa serrana más visitada a lo largo del año.
La ruta 38 invita a recorrerla a través de postales plenas de sierras, ríos y arroyos, al tiempo que presenta poblaciones que diferencian sus propuestas de alojamiento, recreación y gastronomía.
Llega el turno de Cosquín, cuna del Festival Nacional del Folklore, y a continuación Valle Hermoso para dejar paso a La Falda.
La Falda
Situada sobre el faldeo de las Sierras Chicas lanza una consolidada oferta turística que surgió en 1898 cuando se inauguró el Hotel Edén que signó el futuro turístico de la región.
El cerro La Banderita con sus 1.200 metros de altura sobre el nivel del mar es un mojón geográfico de la ciudad serrana.
La Falda cuenta con una variopinta oferta de alojamiento que abarca distintas categorías y por ende, presupuestos.
Se sugiere visitar el complejo recreativo las Siete Cascadas con tres natatorios olímpicos, una piscina para niños, asadores, patio cervecero e infraestructura recreativa.
La Falda se expande en la ladera de las Sierras Chicas de donde emerge la Parroquia del Santísimo Sacramento, mientras numerosos chalés conforman la zona residencial.
Huerta Grande
Dueños del tiempo, los habitantes de la localidad disfrutan de esa geografía serrana a la que defienden con criterio conservacionista. Huerta Grande tiene un centro urbano a medida de sus necesidades y se caracteriza por el turismo social con hermosas colonias sindicales.
Entre las sugerencias para recorrer sobresalen la cascada de Los Olmos, que provee de agua potable a la localidad y forma un encantador paraje serrano, y el Jardín Botánico Doctor Miguel Culaciati, donde se aprecian ejemplares de árboles y plantas autóctonas ya utilizadas por los aborígenes de la región como medicinales.
Balnearios y granjas orgánicas son otros atributos de la tranquila localidad de Punilla.
Villa Giardino
Tal como en muchos pueblos, la instalación del ferrocarril impulsó el desarrollo en las sierras de Córdoba a partir de la inauguración en 1892 del tramo Cosquín – Capilla del Monte.
Villa Giardino fue una de esas villas en las que la explotación de canteras y el ramal ferroviario hicieron necesaria la construcción de viviendas y comercios. En 1939 se hizo el primer remate para lotear terrenos y al poco tiempo Juana Micono de Giardino donó el colegio que hoy lleva su nombre.
Dos años antes se había pavimentado la ruta nacional 38 desde Villa Carlos Paz hasta proximidades de La Cumbre lo que significó un gran desarrollo del valle en general y de Villa Giardino en particular..
Seguidamente se construyó la Iglesia Nuestra Señora de Lourdes, la Municipalidad, el Cine Teatro Alejandro Giardino, el Correo y el puesto Policial en la localidad que en 1964 se comenzó a llamar Villa Giardino.
La impecable fisonomía de cuidados jardines, un siempre florido bulevar y espacios verdes le mereció el nombre de Jardín de Punilla. Pero además es comunidad pionera en el reciclado de residuos orgánicos y cuenta con la primera planta de tratamiento de residuos orgánicos del país.
La privilegiada geografía serrana donde está emplazada la villa y la infraestructura turística son prometedoras de estadías inolvidables.
La Cumbre
A 84 kilómetros al noroeste de la ciudad de Córdoba, La Cumbre conserva las características que la definen desde hace más de 100 años.
Las tradiciones reflejan la pasión de sus primeros inmigrantes: los ingleses, que llegaron con el ferrocarril y que junto al trabajo mancomunado de la población con el fin de lograr una fisonomía distintiva logró singulares éxitos.
De esta manera, La Cumbre ocupa un destacado lugar en el mapa golfístico nacional pero además lo combina con actividades de turismo activo.
Del mismo modo, propone distintas alternativas como el Camino de los Artesanos, donde una docena de casas – talleres conforman la oferta de trabajos en los más diversos materiales.
En tanto, los barrios Cruz Chica y Cruz Grande seducen con ofertas culturales de las más variadas especies
