Inicio Empresas y Negocios ¿Quién debe hacer el mantenimiento de instrumentación técnica delicada?

¿Quién debe hacer el mantenimiento de instrumentación técnica delicada?

Los instrumentos de medición y control que se utilizan en la industria suelen ser costosos y delicados, y de su correcto funcionamiento depende la mayoría de las veces la calidad del trabajo final. Por estos motivos, las empresas prestan especial atención al mantenimiento de sus equipos, como una manera de aumentar su vida útil y evitar inconvenientes que pueden resultar sumamente onerosos.

El mantenimiento a realizar va variando según la singularidad de cada equipo, pero en general, las tareas que con mayor frecuencia se realizan son la calibración on y off site para la mayor parte de las mediciones de presión, caudal, nivel, temperatura y equipos analíticos de medición continua, así como la verificación y/o modificaciones de la configuración de los instrumentos de campo.

Según el equipo de que se trate, durante un mantenimiento periódico se pueden realizar además el chequeo y testeo de entradas y/o salidas; la limpieza o cambio de sondas; la calibración de analizadores de O2 o de pH; la verificación de sensores; el chequeo de válvulas de control; la calibración de transmisores y/o de conductivímetros; la limpieza, lubricación y calibración de registradores con partes mecánicas, y el chequeo de las electrónicas de caudalímetros (Vortex, Magnéticos, Coriolis, etc.).

Hay equipos que poseen información de autodiagnóstico, lo que permite regular las tareas a realizar en forma periódica mediante un mantenimiento predictivo.

Cabe señalar que esta modalidad resulta mucho más accesible que la del mantenimiento correctivo, que es aquel que se implementa cuando ya se declaró el problema.

El mantenimiento de los equipos de medición y control puede ser realizado por personal interno de la empresa, siempre que éste esté correctamente capacitado. Pero ha empresas que prefieren contratar a profesionales externos para delegarles la tarea, lo cual sirve a los fines de no recargar a los recursos propios, y a la vez contar con una mano de obra sumamente especializada para resolver necesidades puntuales.

Si la empresa desea contratar a un proveedor externo para que realice el mantenimiento de su instrumentación de control, debe confirmar que el proveedor del servicio cuente con personal entendido en las distintas disciplinas que demanda la actividad. Lo mínimo esperable es que tenga una capacitación equivalente a la de un Técnico Instrumentista. Además, la compañía debe disponer de todos los equipos necesarios para llevar a cabo las tareas pertinentes. La mayoría de las empresas de Instrumentación y Control cumplen estos requisitos.

Respecto al tipo de contrato, se suele establecer un acuerdo anual que cubra todos los aspectos del mantenimiento que sean necesarios, ofreciendo además la opción de presentar al cliente un reporte anual con recomendaciones técnicas, de acuerdo a los resultados obtenidos en la tarea.