Muchas adolescentes muestran signos de celulitis, y creen que esto tiene que ver con un exceso de peso. Nada más lejos de la realidad: las jóvenes delgadas pueden tener celulitis, porque esta alteración estética no tiene que ver con los kilos.
La celulitis se produce cuando no hay un buen drenaje linfático, por lo que las células grasas se agrupan formando capsulitas, y se forma la llamada “piel de naranja”.
Las hormonas femeninas tienen mucha influencia en la aparición de celulitis, porque pueden favorecer la formación de grasa y la retención de líquido. Por ejemplo, los estrógenos y la progesterona influyen en alguna medida en la formación de grasa y la retención de líquidos, lo cual hace que no circule bien la sangre y que se llenen mas esas pequeñas capsulitas, que luego se endurecen y forman los “bultitos” clásicos de la celulitis.
Por otro lado, aunque se produce en la mayoría de las mujeres, en aquellas que tienen piel más blanca se nota en mayor medida.
También es cierto que hay tendencias familiares que predisponen más a una persona que a otra. Pero además, la vida sedentaria que llevan hoy muchas adolescentes no ayuda a eliminar las grasas localizadas: antes bien, la combinación de sobrepeso y falta de ejercicio pueden incrementarlas.
Una forma de combatir la celulitis es hacer ejercicio para activar la circulación de la sangre, y comer menos sal para no favorecer la retención de líquidos.
Desde el punto de vista de los tratamientos estéticos, la ciencia hoy ofrece varias opciones sencillas, no invasivas y sin efectos colaterales, como la electroporación dérmica, el drenaje linfático, el accent -radiofrecuencia- y el body term.
La electroporación dérmica es un tratamiento novedoso que consiste en aplicar ondas electromagnéticas pulsadas, en forma localizada. Es ideal para eliminar la celulitis en uno o dos meses, combatir la adiposidad localizada, y reafirmar los tejidos.
En el caso del drenaje linfático, la linfa es un líquido que circula a través de los vasos linfáticos, por el interior del organismo, para llevar nutrientes y oxígeno a los lugares donde no llegan los vasos sanguíneos. Al no haber un buen drenaje linfático aumentan las posibilidades de que se forme celulitis por acumulación de líquido y toxinas. Los masajes ayudan a que se reactive la circulación llevándose las toxinas, el líquido y la grasa que forman los “bultitos” clásicos de la celulitis.
Luego, el Body Term atraves de energia electromagnetica y el Accent – radiofrecuencia son tratamientos que se basan en la aplicación localizada de calor a través de diferentes técnicas y aparatología. El calor se transmite hasta los tejidos, estimulando la eliminación de grasas ; devolviendo tonicidad a la piel y eliminando ese poceado tan odioso de la celulitis.
Finalmente, es importante señalar que –como señalamos más arriba- en estos casos lo mejor es inicial acciones preventivas. Respecto a los tratamientos estéticos de celulitis para adolescentes, en general se comienza recién a partir de los 18 /20 años, edad en la que el cuerpo ya está mayormente constituido y hay una cierta madurez emocional.
