Entrevista completa con Aishwary Gupta, Global Head of Payments and RWA en Polygon Labs , en el cual se habla del gran impulso y adopción de stablecoins en Latam, especialmente Argentina y Brasil, entre otros temas.
–En los últimos meses, hemos observado que Latinoamérica, liderada por Brasil y Argentina, se ha convertido en una de las regiones con mayor adopción de stablecoins en Polygon. ¿Qué factores estructurales de la región, en comparación con otras partes del mundo, cree que están impulsando esta adopción?
La adopción de stablecoins en Latinoamérica se debe a factores como la inflación persistente, la necesidad de sistemas de pago internacionales más eficientes, rápidos y económicos, y la facilidad de acceso a las stablecoins como alternativa a los servicios financieros tradicionales, a los que muchos no tienen acceso. Existe una demanda natural de activos digitales vinculados al dólar estadounidense que preserven el poder adquisitivo. Polygon se ha convertido en una plataforma cada vez más atractiva, ya que las tarifas de transacción en algunas blockchains (como Tron) han subido recientemente, mientras que en Polygon cuestan solo una fracción de centavo. Esto es crucial para los usuarios que usan stablecoins para pagos y ahorros cotidianos, como ocurre en Latinoamérica, mientras que en Norteamérica y Europa las criptomonedas se suelen usar como vehículo de inversión. Observamos que casi la mitad de las transferencias de stablecoins en Argentina utilizan USDC, y Polygon ha experimentado un aumento del 141% en las transferencias pequeñas de USDC este año, con Latinoamérica impulsando gran parte de este crecimiento. La población joven, nativa digital, ha adoptado rápidamente estas herramientas, especialmente porque los servicios financieros tradicionales siguen siendo inaccesibles para muchos. Nuestra colaboración con Mercado Bitcoin para apoyar su plan de emitir más de 200 millones de dólares en activos tokenizados en 2025 demuestra cómo esta adopción generalizada está atrayendo la atención institucional, que seguirá creciendo. Recientemente, el volumen de transferencias de stablecoins en Polygon aumentó un 53% solo en agosto, alcanzando los 85.800 millones de dólares, mientras que la oferta de stablecoins subió a 2.900 millones de dólares, frente a los 2.700 millones de julio y los 2.400 millones de junio. Las transferencias se mantuvieron estables en 98 millones de dólares, frente a los 97,7 millones de julio y los 88,3 millones de junio. Actualmente, las stablecoins no vinculadas al dólar estadounidense también están ganando terreno rápidamente en Polygon, lideradas por EURC, que experimentó un crecimiento de más del 50% en volumen. Le siguen stablecoins vinculadas al dólar de Singapur, el peso filipino, la rupia indonesia, el peso mexicano, el real brasileño y el peso colombiano.
–Los datos muestran un crecimiento exponencial en las transferencias de stablecoins en la red Polygon, especialmente en transacciones pequeñas y cotidianas. ¿Cómo se está adaptando Polygon para gestionar este volumen creciente, manteniendo al mismo tiempo bajos costos de transacción y una escalabilidad a largo plazo?
Polygon PoS fue diseñada desde el principio para procesar un gran volumen de transacciones con tarifas inferiores a un centavo, y estamos optimizando continuamente la plataforma para los casos de uso de pagos que observamos en Latinoamérica. Actualmente, procesamos transacciones con tarifas que son solo una fracción de un centavo, lo cual es fundamental para los usuarios que realizan compras cotidianas o envían remesas. Polygon mantiene costos estables y predecibles, lo que la hace ideal para transferencias de bajo valor.
Nuestros equipos de ingeniería trabajan en varios frentes para garantizar el crecimiento sostenido. Actualmente, estamos escalando a más de 1000 transacciones por segundo en la red de prueba, con la meta de alcanzar más de 100.000 TPS en el futuro. Además, logramos una finalización de transacción en menos de un segundo, lo cual es esencial para una experiencia de pago tan rápida como la de los sistemas de pago digitales tradicionales. La clave reside en que no nos limitamos a escalar para aumentar el volumen. Optimizamos la plataforma específicamente para los tipos de transacciones que necesitan los usuarios en Latinoamérica, ya sea para comprar la despensa con USDC o enviar dinero a familiares en el extranjero. Este enfoque en la utilidad real define nuestra estrategia de desarrollo de infraestructura.
–La adopción de las stablecoins en Latinoamérica no solo responde a necesidades locales como la inflación y las remesas, sino que también parece anticipar un nuevo modelo de finanzas globales más inclusivas. ¿Qué papel cree que desempeñará la región en la próxima fase de integración entre criptomonedas, criptomonedas estables e instituciones financieras tradicionales?
La región está liderando el desarrollo de nuevos casos de uso que podrían desempeñar un papel fundamental en la transformación de las finanzas globales. Históricamente, Latinoamérica ha sido pionera en la adopción de diversas tecnologías criptográficas, y esta tendencia continuará. Consideremos el caso de Nubank, que revolucionó el sector bancario brasileño al atender a 70 millones de usuarios excluidos del sistema financiero tradicional, y que ahora está implementando soluciones basadas en Polygon. Del mismo modo, la alta inflación en Argentina ha convertido al país en un laboratorio natural para la innovación en criptomonedas estables, con proyectos como Ripio, que lanzó criptomonedas estables vinculadas al dólar, específicamente para usuarios de la región. Cabe destacar también el gran talento tecnológico en criptografía que existe en Latinoamérica.
Cuando un servicio tan popular como Stripe cobra solo el 1,5% por transacciones con criptomonedas estables, frente al 2,9% de las tarjetas tradicionales, y cuando las remesas se pueden enviar por precios mínimos, en comparación con el 6-8% que suelen cobrar los proveedores tradicionales, observamos una mejora sustancial en la eficiencia financiera, considerando el volumen de transacciones. Mientras las instituciones financieras tradicionales en todo el mundo buscan cómo integrar la tecnología blockchain, cada vez miran más a Latinoamérica en busca de modelos exitosos, ya que la región lleva varios años de ventaja. Latinoamérica está construyendo el futuro de las finanzas mediante una innovación práctica que resuelve necesidades inmediatas y crea la infraestructura para la economía del mañana.
