En el inicio de un proceso de selección, las empresas establecen los requisitos del puesto que desea cubrir. Y, desde luego, uno de ellos es el nivel salarial.
Por lo tanto, una vez seleccionados los candidatos que reúnen los requisitos técnicos, llega el momento de confrontar la compensación que la empresa ofrece y lo que el postulante desea.
Este es uno de los temas más importantes de un proceso de selección ejecutiva. Veamos algunos consejos para encararlo con éxito…
1) No es conveniente incluir las aspiraciones salariales en el currículum. La remuneración pretendida debe figurar en la carta presentación.
Allí mismo, además de destacar las razones por las que usted es la persona correcta para el empleo, mencione claramente que está dispuesto a “conversar” el monto mencionado, de acuerdo con las responsabilidades de la función y de los beneficios que incluya el paquete salarial.
Eso le permitirá no ser descartado en caso de exceder el monto previsto por la empresa. Al selector, por su parte, le servirá para evaluar ciertas condiciones mínimas de negociación que debe poseer cualquier aspirante a un puesto gerencial.
2) Es conveniente que ambas partes hayan efectuado una cuidadosa investigación del nivel salarial de mercado para el puesto en cuestión.
Hay mucha información gratuita en Internet (por ejemplo, en nuestro site ofrecemos datos de diferentes puestos que incluyen salarios promedio, etc.)
En este punto, no hay que temer contactarse con un consultor de carrera, que podrá brindarle esta clase de información.
3) Tenga en cuenta que los niveles salariales son diferentes en grandes empresas y PyMEs.
Considere también aspectos específicos como el nivel de demanda de cada posición, que también influye en la mayor o menor gradación del nivel salarial.
Tenga en cuenta que en algunas posiciones gerenciales existen condiciones de mercado que “alteran” los valores tradicionales.
4) Las remuneraciones gerenciales incluyen ciertos beneficios como planes de obra social, seguro de vida, automóvil, bonus anual, etc. Estos beneficios forman parte de la remuneración total del ejecutivo.
En definitiva, la manera de alcanzar una situación de ganar/ganar entre empresa y candidato es INVESTIGAR antes de poner la remuneración pretendida.
