La aromaterapia no sólo puede ayudar a los adultos, también es una herramienta muy útil para los niños. Masajes, difusiones y mezclas de aceites esenciales son alternativas válidas y efectivas. Conocer las recetas que se pueden usar con los pequeños es muy valioso.
Primero hay que saber que no todos los aceites esenciales están recomendados para los niños. Algunos son muy fuertes y conviene evitarlos. También, es importante recordar siempre que no deben aplicarse directamente sobre la piel ya que causan irritación.
Uno de los aceites esenciales que con más frecuencia se usa en la infancia es el de lavanda. Este tiene un olor muy agradable y es relajante. Es ideal para tratar la falta de sueño y la fatiga. Un hornito en la habitación o durante el baño, una gota en la almohada pueden hacer que las noches cambien. También puede emplearse para calmar las picaduras de insectos y ayudar a que las heridas cicatricen más rápido.
Para curar las heridas de una manera natural, una receta de aromaterapia para elaborar una mezcla antiséptica puede ser: 3 gotas de aceite esencial de lavanda y 2 gotas de aceite esencial de árbol de té aceite de ajonjolí. Mezclar bien los ingredientes y luego aplicar sobre las heridas, previamente lavadas con agua y jabón. De esta manera, se desinfectan y se aprovechan las propiedades cicatrizantes de la lavanda.
Probarlo puede ser un buen comienzo para acercarse a la cosmética y medicina natural.
