En Europa acaba de nacer un nuevo competidor para los operadores eléctricos tradicionales. La cadena Carrefour eligió Bélgica para lanzarse a competir en el mercado de la electricidad.
La compañía dio el paso apadrinado por la Comisión Europea, que aprovechó la ocasión para animar a que otros grupos de distribución y empresas de todo tipo sigan este ejemplo.
También animó a los directivos de Carrefour a no conformarse con Bélgica, y extender su oferta energética a los consumidores de más países de la Unión Europea.
La dirigencia comunitaria felicitó la iniciativa de Carrefour porque le ayuda a impulsar dos de sus prioridades: la apertura de este sector a una libre competencia genuina, y el desarrollo de las energías producidas a partir de fuentes renovables.
Cuando un consumidor belga acuda a un establecimiento de Carrefour para comprar fruta y verdura, por ejemplo, también tendrá la oportunidad de llevarse firmado en su carrito de la compra un contrato de suministro eléctrico que sustituirá al que en ese momento tenga en vigor con su proveedor habitual.
El contrato, según cada caso individual, garantizará la facturación de un determinado nivel de precios durante uno, dos o tres años; lo que no está mal en estos tiempos de costes energéticos desbocados.
La otra garantía es que la energía será producida a partir de fuentes renovables: más respetuosas con la naturaleza en general y, en particular, con un impacto reducido en el cambio climático. Carrefour no entrará en el negocio de la generación energética.
De acuerdo a El Economista, la empresa sencillamente distribuirá la energía que previamente compre a productores verdes.
Según los datos facilitados por la Comisión Europea, el 62,96 por ciento de la electricidad distribuida en Bélgica por Carrefour será de origen eólico; el 35,58 por ciento provendrá de biogas o biomasa; el 1,38 por ciento, de cogeneración cualitativa; y el 0,07 por ciento, de plantas hidroeléctricas.
“Estoy muy contento de ver que un nuevo tipo de empresa ofrece un producto interesante a los consumidores, en el marco del mercado europeo de la electricidad”, declaró el comisario Andris Piebalgs antes de invitar a reproducir la iniciativa.
“Espero que el ejemplo de Carrefour sea seguido rápidamente por otras compañías en toda Europa, lo que beneficiaría a todos los consumidores”, agregó.
