La cervecería de origen argentino Quilmes inauguró este jueves su segunda instalación mixta, al incorporar de una planta de refrescos a una de sus fábrica de cervezas en el país, con una inversión de más de 11 millones de dólares para consolidar su posición de mercado.
La nueva planta, construida en la localidad de Zárate en la Provincia de Buenos Aires a unos 85 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, tiene una capacidad de producción anual de 1 millón de hectolitros de refrescos, que llega a 4,2 millones de hectolitros al sumar la elaboración de cervezas.
Cervecería y Maltería Quilmes tiene la franquicia exclusiva para producir, distribuir y comercializar la línea de productos PepsiCo en Argentina.
“La incorporación de la producción de gaseosas en nuestra planta de Zárate es un paso importante que consolida la posición de la compañía dentro de la industria de bebidas de la Argentina,” dijo Joao Castro Neves, presidente de la empresa.
“Este año la compañía tiene planeado invertir en Argentina más de 100 millones de dólares,” afirmó.
La cervecería es controlada por AmBev a través de su empresa Quinsa, que es líder en Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia, y que tiene además una participación en el mercado chileno.
La Companhia de Bebidas das Américas (AmBev) es la mayor industria privada de bienes de consumo de América Latina.
En Brasil, donde lidera el mercado de cerveza, posee las marcas Skol, Brahma, Antartica, Bohemia y el refresco Guaraná Antartica, entre otras marcas.
