Inicio Empresas y Negocios Cinco consejos para “sobrevivir” a los compañeros pasivo-agresivos en el trabajo

Cinco consejos para “sobrevivir” a los compañeros pasivo-agresivos en el trabajo

De acuerdo a los expertos, estos empleados suelen esconder “emociones de odio”, sobre todo contra sus superiores, que son el origen de esta conducta


Los lugares de trabajo, como todo espacio de convivencia, incluyen en muchos casos conflictos y peleas entre miembros del equipo.

En ocasiones, estos conflictos no ocurren de forma manifiesta con peleas a viva voz, sino que se insertan de forma solapada en la dinámica diaria. Esto sucede, por ejemplo, cuando uno de los empleados se comporta de forma pasivo-agresiva.

De acuerdo al portal español ABC, estas personas suelen ser vagos, esconden información, provocan conflictos e incluso presumen de su incompetencia.

La psicóloga Signe White dijo al mencionado sitio web que los “pasivo-agresivos esconden emociones de odio”. Estas emociones “cubiertas”, afirma, tienen mucho que ver con la incapacidad de ser honesto con un superior.

En ese marco, se proponen cinco consejos para “sobrevivir” en un ambiente de trabajo con un compañero pasivo-agresivo:

1- Ser claro
Decir exactamente lo que se va a hacer en el trabajo, sin máscaras ni expectativas que no se puedan cumplir.

Según White “expectativas claras con sus consecuencias hacen mucho más difícil esta conducta en el trabajo”. Esto lleva a una búsqueda de la honestidad que a la larga será reconocida por todos los compañeros.

2- Comunicación cara a cara
Buscar la comunicación directa, en lugar de las redes sociales, siempre refuerza el contacto. Sobre todo porque los pasivo-agresivos suelen utilizar siempre el método electrónico, “evitando la confrontación”, indicó la experta.

3- Nunca responder ira con más ira
El pasivo-agresivo casi siempre busca que el otro sea tan violento como él. Cuando no se es de este modo, la estrategia del atacante queda desmontada. No aguantan, afirma White, “que el otro sea responsable de su conducta”.

4- Preguntar sobre el enojo
Cuando alguien está muy enojado, una buena estrategia es siempre preguntar por la génesis. Los pasivo-agresivos nunca esperan que el otro se interese por sus problemas:, ya que los ven como un enemigo.

5- No abusar del poder
Los pasivo-agresivos suelen abusar de su poder o hacerse las víctimas, buscando un tipo de chantaje emocional.

Según el psicólogo de Harvard Peter J. Frost “el dolor es un hecho en la vida de cualquier organización”, y la clave está en cómo enfocar esa “toxicidad” en algo positivo.

La respuesta, afirma, debe ser la clemencia, poner la otra mejilla y ver que se consigue más cosas con el perdón que con el poder.