El home office, o trabajo desde la casa, es una modalidad que están incorporando las empresas de diferentes rubros. Según un estudio realizado en 24 países por Ipsos/Reuters, en todo el mundo, el 17% de los empleados trabaja desde sus hogares y el 83% considera que es más ventajoso que desde la oficina.
Para que la implementación del home office sea exitosa, es necesario establecer una serie de pautas. Se debe tener en cuenta que trabajar desde la casa no significa estar disponible para atender a los hijos, las mascotas o cualquier imprevisto hogareño. Por esto es necesario fijar límites y evitar las interrupciones.
Un lugar de trabajo en la propia casa
Es necesario definir un lugar físico en la casa, quedarse solamente con el material necesario para realizar el trabajo, mantener una buena iluminación, asegurarse de estar cómodo y de no ser interrumpido durante la jornada. No se recomienda mezclar la vida personal con el trabajo. En este contexto, se sugiere no trabajar desde el dormitorio o la sala de estar.
Administración del tiempo
Un buen consejo es mantener el lugar de trabajo siempre limpio y ordenado. Cuidado con la ropa o los abrigos sin guardar.
Buena alimentación
Quien trabaja en casa tiene la opción de comer de una forma más saludable y tener un almuerzo tranquilo. Mantener una alimentación sana es esencial, pues esta modalidad de trabajo puede fomentar el sedentarismo.
La concentración
Es mejor apartarse de la televisión, los video juegos y hasta de la heladera. Se puede estructurar el tiempo y realizar pausas cuando sea necesario, pero sin abusar. Hay que focalizarse: desde casa, sigue siendo un puesto de trabajo.
Cuando más factores externos existan, mayor será la probabilidad de perder la concentración. Para lograr rendir bien desde el hogar es necesario tener disciplina, por lo cual plantearse metas ayudará a cumplir con los objetivos de la rutina laboral..
