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Consumidores al poder: el mapa de la carne

A raíz de la suba de la carne, un grupo de usuarios creó un mapa, con más de 100 carnicerías de todo el país, donde se puede consultar online los valores de los cortes. Los consumidores pueden agregar datos para mejorar la información.


Los consumidores de hoy en día no son pasivos como antaño. Cuando el país da algún giro inesperado o no demasiado bienvenido los consumidores, en unas pocas horas, ponen manos a la obra y reaccionan para dar una respuesta. Potenciados por las redes sociales, los proyectos de acción ciudadana de los consumidores los empoderaron y hoy toman la web como base de operaciones.  Cuando los cortes de luz azotaban el país, se creo la aplicación y sitio web AcáNoHayLuz para alertar sobre la situación y en 2014, la organización Acción Ciudadana convocó a través de Facebook a un masivo “Apagón de Consumo”alertados ante la suba de los precios. Hoy el problema es otro pero la metodología es la misma

En La Plata, cansados de las excesivas subas en los precios, elaboraron una plataforma colaborativa que releva valores en distintas carnicerías. Por ahora contiene sólo comercios porteños y alguno del Conurbano, aunque pretenden que se extienda a todo el país. “Es una plataforma colaborativa que necesita de la participación activa de la gente para que este actualizada”, explicó Miguel Graziano, creador de este original mapa en Google Maps, en el cual, los distintos usuarios, en forma anónima, pueden modificar los valores o agregar información para mejorar la calidad del servicio. En el día de su lanzamiento contó dos mil visitas, pero hoy ya son decenas de miles. “Me hubiera gustado hacerla un poco menos amateur”, admite Miguel que tuvo el primer Google Maps listo en sólo 4 horas, a base de datos aportados por amigos y conocidos, y que a pesar de que hay mucho por agregarle, no se arrepiente de haber lanzado. “Haber hecho este primer paso, de esta manera, hizo que la cosa se pusiera en movimiento y apareciera gente”, dejó saber en una entrevista. Algunos incluso están agregando el precio del carbón y el vino, dos complementos infaltables en el asado nacional.

Las iniciativas de este tipo demuestran que los consumidores se quieren hacer escuchar y están dispuestos a cuidarse entre sí tanto de los abusos de las empresas y los comerciantes como de otros problemas cotidianos.