Un estudio de mercado realizado, durante julio, por NEDER – consultora especializada en consumo, reveló que, para algunos, todavía es posible darse gustos y gratificarse a partir de la compra de bienes o realizando alguna actividad de esparcimiento, como comer afuera.
“A pesar de la crisis, una de cada cuatro personas dice haberse dado un gusto en alguna de sus compras en los últimos 6 meses. Y uno de cada diez admite que lo que gastó fue excesivo en relación con sus ingresos”, afirma Silvina Neder, Directora de NEDER, consultora especializada en consumo.
En los últimos seis meses, el 47% de los entrevistados compró sólo lo necesario, tratando de buscar el mejor precio; el 28 % admitió que compraron sólo lo necesario, pero no resignaron calidad por precio. Por otra parte, el 25 % reveló que se dieron el gusto al realizar compras. De este último porcentaje, el 90 % de ellos estuvieron en relación con sus ingresos, en tanto que el 10 % fueron excesivos con respecto a sus ingresos.
Según el estudio racional “Compras: gratificaciones, gustos y excesos”: salir a comer, ir a espectáculos como teatro o cine, viajar, comprar algún alimento gourmet, practicar deportes o ir al gimnasio e ir a la peluquería, son gustos que están casi siempre dentro de las posibilidades y en línea con los ingresos de quien compra.
“No obstante, para los gustos más exclusivos – como por ejemplo, electrodomésticos, insumos para el auto o artículos de electrónica- las personas suelen gastar fuera de sus posibilidades, es decir en una relación desproporcionada con sus ingresos”, resalta Neder.
Comer afuera es la opción elegida por el 60% de la muestra como el mayor gusto que se dieron. “En cuanto a las diferencias entre las gratificaciones a través del consumo entre mujeres y hombres, se observa que “ellas” se exceden en hobbies y en productos para verse bien físicamente. En cambio, para “ellos” acondicionar el auto y tener los últimos “gadgets” electrónicos son las opciones más elegidas”, concluye Neder.
NEDER entrevistó a 700 personas residentes en AMBA, Rosario y Córdoba; hombres y mujeres de 18 a 65 años, por medio de encuestas coincidentales.
