Inicio Empresas y Negocios El Gobierno porteño sólo usará papel ecológicamente sustentable

El Gobierno porteño sólo usará papel ecológicamente sustentable

Grupo Crescent (www.grupocrescent.com.ar) anuncia la certificación de la Imprenta del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires bajo la normativa de calidad FSC (Forest Stewardship Council). Esta certificación asegura que el ente estatal sólo consumirá papel custodiado y así garantizará que el mismo es proveniente de fuentes ecológicamente sustentables. Se trata del primero organismo público que certifica esta norma en la Argentina.

Esta certificación es el primer paso en la concreción de la meta anunciada por el Jefe de Gobierno Porteño, Mauricio Macri, en el pasado XIII Congreso Forestal Mundial realizado en Buenos Aires en Octubre de 2009, que es convertir a la gestión pública de la Ciudad en la “gestión verde”, contribuyendo a la subsistencia de los bosques y su biodiversidad, y al desarrollo forestal sustentable.

La certificación FSC es otorgada por el Consejo de Manejo Forestal, Forest Stewardship Council (FSC), que es una ONG internacional que promueve el sistema de certificación forestal voluntario. Hasta el momento, un total de 48 empresas argentinas obtuvieron esta certificación ecológica en el marco de un escenario forestal de emergencia que reclama este tipo de medidas para evitar la destrucción de bosques nativos y el consumo de los derivados obtenidos por los mismos. Sin embargo, el gobierno de la Ciudad es el primer ente estatal en dar un paso concreto en este sentido.

La obtención de esta distinción por la Imprenta se suma a las de muchas empresas gráficas que han confiado en Grupo Crescent a fin de obtener la certificación de su Cadena de Custodia FSC.

FSC en Argentina – Primero los bosques, luego sus derivados (madera y papel)

Esta normativa comenzó a aplicarse en la Argentina casi exclusivamente en forestaciones comerciales tales como los bosques de cultivo, en una iniciativa que apuntaba a protegerlos de la súperproducción de pulpa y madera. Pero luego, la norma fue virando en un estándar restrictivo para la comercialización internacional de derivados de la madera y así comenzó a aplicarse a toda su cadena de derivados, como por ejemplo aquellas organizaciones que tienen como insumo principal al papel o la madera, y entre las que se encuentran las graficas, las imprentas y las fabricas de muebles, entre otros.

La certificación forestal permite al consumidor identificar el producto que está consumiendo (un tipo de papel, un producto elaborado con madera, etc), como proveniente de un bosque manejado con criterios ambientales, económicos y sociales. En el caso de las industrias que manejan los derivados del papel o la madera, lo que se certifica la FSC es la cadena de custodia. Es decir, la certificación del cuidado de la trazabilidad de esos productos, cuando se incorporan a otro proceso productivo. O sea, que la certificación FSC cadena de custodia (así su denominación), debe asegurar que un producto que se vende con certificación FSC tenga origen real en materias primas FSC (de maderas obtenidas de bosques de cultivo especialmente creados en función de una conciencia ambiental que no perjudique la región)