Todo el tiempo nacen decenas de miles de empresas que juegan en el potrero y en las divisiones inferiores de los clubes. Pero por lo general, a los cinco años la mitad cuelga los botines. Así y todo, en cada equipo hay jugadores ofensivos que logran hacer goles que valen doble, porque crean mucho empleo de calidad y actividades con alto contenido de diferenciación, diseño e innovación. En otras palabras juegan en las grandes ligas.
¿Cuál es el ADN de estos emprendedores y cuáles las prácticas que les permiten lograrlo? Los ingredientes más conocidos: encontrar oportunidades de negocios escalables, equipos emprendedores con capacidades complementarias, división de roles, redes de contacto y liderazgo basado en una sólida visión y ambición de crecimiento.
Además, la gestión de estas empresas durante sus primeros años de vida suele estar plagada de desafíos, tales como testear y validar la idea de negocios, convencer a los primeros clientes, acceder a recursos, gestionar recursos humanos. Sin embargo, el crecimiento acelerado puede derivar en una grave crisis si no se lo sabe gestionar.
Quienes superan la prueba suelen exhibir una elevada capacidad para estar alerta ante las oportunidades de negocios, están cerca y escuchan a los potenciales clientes (especialmente a la hora de innovar), utilizan ampliamente Internet para investigar el mercado, tejen redes de contacto de calidad, circulan por distintos ámbitos empresariales e invierten en la construcción de reputación e identidad empresarial (tanto hacia dentro como hacia fuera).
Por otra parte, la gestión financiera de las empresas incluye saber vender el proyecto ante clientes y proveedores de los que obtienen anticipos y créditos, posponer el cobro de las primeras utilidades, aprovechar oportunidades de compra de equipos usados en buen estado, usar la tarjeta de crédito e incluso estar dispuestos a cobrar salarios iniciales inferiores a los de la empresa donde trabajaban antes de emprender. De esta forma, completan los siempre insuficientes recursos propios y de amigos y parientes. Unos pocos, incluso, logran acceder a la embrionaria oferta de inversores de riesgo.
¿Otro tema clave? La gestión de los recursos humanos, dado que el crecimiento requiere atraer y retener empleados calificados en condiciones desventajosas frente a las empresas consolidadas. Por caso, en Technisys, una firma creadora de software para bancos evoca la incorporación de dos maduros ejecutivos de IBM para sumar experiencia y contactos, o los fundadores de Body Health –equipos para tratamiento estético- que enfatizan la importancia de haber asociado tempranamente a sus empleados clave como el mejor camino para sumar talentos en los inicios.
También es muy importante el clima emprendedor que se respira, los valores que transmiten los fundadores y, en particular, la existencia de un ¨contrato social¨ que los asocia al crecimiento futuro del proyecto.
