Inicio Empresas y Negocios En la última década aumentó significativamente el requisito de idiomas para los...

En la última década aumentó significativamente el requisito de idiomas para los puestos de trabajo

Adecco Argentina, luego de una investigación dentro de sus búsquedas llegó a la conclusión de que la lengua inglesa domina el mundo de los negocios, se mantiene como requisito imprescindible y continúa siendo la más solicitada dejando en segunda posición al portugués para puestos regionales, principalmente para el Mercosur. Para cargos específicos de relacionamiento con países puntuales, lenguas como el chino y el alemán también son requeridas.

De acuerdo a este estudio, la edad no es un factor significativo a la hora de requerir el conocimiento de alguna lengua sino que está ligado con las características del trabajo o el tipo de empresa: nacional o multinacional.

Según Adecco Argentina, los candidatos con estudios universitarios y terciarios son los perfiles que más conocimiento tienen en idiomas extranjeros: el 90% de los postulantes menciona su nivel de conocimiento sobre otra lengua para posiciones de mandos medios a gerenciales. Para puestos operativos esta cifra es menor al 50%.

Dentro de las regiones que presentan una mayor demanda se destacan Capital Federal, Conurbano y la Patagonia, radicándose en éste último territorio empresas del rubro petrolero. Sin embargo regiones como Cuyo, Centro, Litoral y NOA también presentan un nivel de solicitud similar pero la diferencia radica en el tipo de puesto a ocupar.

En cuanto a las industrias, aquellas que requieren un nivel de idioma se encuentran las empresas de tecnología, petróleo y servicios como las más destacadas. Se adquiere especial relevancia del idioma en posiciones, más allá del rubro, que tengan contacto con las casas matrices que se encuentran en el exterior para ser nexo y actúen como intermediario.

En un mundo cada vez más globalizado y participativo el conocimiento de los idiomas es un requerimiento fundamental para el candidato. Hoy las empresas establecen relaciones comerciales con diferentes filiales, sucursales e incluso clientes, por lo que demandan empleados que intermedien con un idioma en común.