La “Fundación Códigos”, que preside el investigador Luis Seguessa manifestó su fuerte apoyo a la decisión política que tomaron recientemente las autoridades de Ciudad de México de impulsar la utilización del auto eléctrico a partir de 2011 como una de las medidas para aliviar la polución.
El gobierno del Distrito Federal, a cargo de Marcelo Ebrard anunció que elaborará un plan para adecuar lugares públicos para permitir la recarga de vehículos eléctricos.
Luis Seguessa, experto investigador en temas ambientales resaltó las cualidades del auto eléctrico ya que los autos tradicionales no solo liberan gases contaminantes a la atmosfera sino que consumen gran cantidad de oxígeno lo que debilita enormemente la capa de ozono.
Seguessa dijo que “la reserva de oxígeno se está consumiendo a gran velocidad a partir de la existencia en la Tierra de casi 800 millones de motores de vehículos que consumen cada uno la misma cantidad de oxígeno que 700 personas”.
Rechazó el titular de la Fundación Códigos los reparos que desde diversos sectores se hace a la difusión del auto eléctrico a raíz de los costos de infraestructura para la recarga de baterías y al hecho de que muchas veces la energía eléctrica necesaria requiere de generadores a gas tradicional, lo que termina también contaminando la atmósfera. Seguessa señaló en este punto que “eso depende de la estructura energética de cada país ya que tenemos el caso de Brasil, por ejemplo, donde gran parte de su abastecimiento eléctrico se hace desde represas hídricas. Además es importante tener en cuenta que un solo motor de combustión de generación térmica genera electricidad para miles de automóviles lo cual reduce en miles de veces el consumo de oxigeno y la emisión de gases”.
Argumentó además que. “el precio de consumo de recarga de una batería para un auto eléctrico es 19 veces menor que el precio del combustible”.
“El auto eléctrico es la única solución para frenar el cambio climático y sanear el planeta antes de que sea demasiado tarde. La gran reserva de oxígeno que tenemos los humanos está en la capa de ozono, que se sigue reduciendo a gran velocidad. Esto ha dado lugar al recalentamiento global, con las consecuencias por todos conocidas”, dijo el investigador en Medio Ambiente.
