Inicio Empresas y Negocios La oferta local estancada va a motorizar las importaciones

La oferta local estancada va a motorizar las importaciones

La escasez de inversiones determinará que, el año próximo, las importaciones vuelvan a crecer, después de la caída de 35% sufrida este año a causa de la recesión. Las automotrices y el sector agrícola liderarán la suba de las compras al exterior, que se ubicará entre 25 y 31% por encima de los niveles de 2009.

Como nadie sabe qué actitud tomará en 2010 el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, respecto a las restricciones que aplicó este año para mantener las importaciones de sectores críticos a raya, los analistas diseñan distintos escenarios según consideren que se abrirá o se cerrará la canilla.

Desde Finsoport, Gonzalo Bernat estima que “los principales rubros de las importaciones se recuperarán por diversos factores: el crecimiento del nivel general de la economía, las restricciones en la oferta energética interna y el relajamiento gradual en las restricciones a la importación”.

Uno de los indicadores usados para proyectar las importaciones es la elasticidad. Bernat calcula que nuevamente se ubicaría en torno a 3, el nivel que traía antes de la recesión. Esto significa que por cada punto que crezca el producto bruto, subirán tres puntos las importaciones (ver infografía).

Con el consumo y la inversión como las dos variables principales que empujan hacia adelante el producto, las importaciones se verían beneficiadas por ambos lados.
“En la medida en que no se prevé un aumento notable de las inversiones, la capacidad productiva local permanecerá constante ante el aumento gradual de la demanda interna, lo que determinará la necesidad de aumentar la oferta de importados”, apunta Finsoport.

Rodrigo Alvarez, de Ecolatina, coincide en que “el problema no es la demanda, sino generar la oferta”. Pero, además, aporta otra visión. “La inversión tuvo una caída de 13% este 2009 y el año que viene va a crecer 4%. Esto implica que las importaciones ligadas a la inversión van a estar muy anémicas. Proyectamos algo menos de US$50.000 millones contra 38,6 mil millones para este año”.

A pesar de esto, “todavía no recuperaremos el techo de 57.400 millones de 2008. Estamos volviendo a un nivel intermedio con 2007, por eso proyectamos una recuperación modesta”, dice Alvarez.

Mauricio Claverí, coordinador de la unidad de análisis de comercio exterior de Abeceb.com, menciona que “para el próximo año se espera una recuperación significativa de las importaciones, especialmente en determinados sectores que sufrieron caídas importantes este año”.

En cuanto a los sectores que motorizarán el aumento de las compras externas, uno de los principales será la industria automotriz. Según Finsoport, habrá un incremento de 16% en piezas y accesorios, incluyendo autopartes. “También el agro será responsable por una porción significativa del incremento en las importaciones de combustibles”, sostiene Bernat.

“Se destacará la importación de maquinaria agrícola, material de transporte y bienes de capital diversos; y también, fertilizantes, autopartes y químicos; ambos insumos de industrias que se perfilan como de mayor dinamismo para el año entrante”, dice Claverí.

Del lado de las importaciones para consumo, será determinante la actitud que asuma el Gobierno respecto de las licencias no automáticas que aplica para trabar el ingreso de productos. Según Alvarez, “los bienes de consumo deberían tener una recuperación más dinámica. El mundo se está volviendo más accesible, estos artículos ya dejan de ser caros. La Argentina, en muchos rubros, como textiles, está más cara que en otros países”. Por ese motivo, “es ahí donde el gobierno nacional está trabando algunos productos”.

Ecolatina proyecta para 2010 exportaciones por US$65.000 millones e importaciones por 50.000 millones, por lo que “estamos en un superávit de 15.000 millones; es un saldo bastante elevado”.

Abeceb.com espera un resultado comercial “muy similar al de 2009”, con subas de las importaciones de entre 25 y 31% (ver infografía). Los analistas detallan que “la oscilación dependerá de la fuerza con que la demanda mundial impulse las exportaciones, sobre todo a través de los precios de los commodities”. Claverí señala que la magnitud de las exportaciones decidirá en parte las restricciones que se apliquen sobre las importaciones. “Lo que el Gobierno buscará será asegurar un significativo superávit comercial”, sostiene.