Inicio Placeres Llega Esperado de Callia, lo bueno y deseado siempre se hace esperar

Llega Esperado de Callia, lo bueno y deseado siempre se hace esperar

Bodegas Callia –bodega de San Juan líder en innovación- presenta Esperado de Callia, un Shiraz-Malbec de maduración prolongada cultivados en los viñedos de Caucete, San Juan.

Esperado de Callia es el primer vino argentino que representa una categoría que crece a nivel global, especialmente en Estados Unidos (con marcas como Apothic y Ménage à trois) donde los consumidores se acercan al vino con nuevos códigos, tanto culturales como de gustos. Y así, en el hemisferio Norte, en los últimos años emergió una gama de vinos amables, fáciles de tomar cuya clave de éxito –venden millones de cajas al año- está precisamente en que le ofrecen al consumidor un sabor frutal, paladar amigable y un estilo innovador. Eso mismo es Esperado de Callia.

Para su elaboración, el equipo de Bodegas Callia desarrolló una técnica denominada “maduración prolongada”. Para conseguirla, adecuaron la relación de frutos por planta, que sumado a un riego diferenciado y a las condiciones desérticas de la región, les permitió prolongar la maduración de las uvas en la planta. Así, lograron un vino frutado, ligeramente dulce, suave y de paladar moderno.

La primera cosecha de Esperado de Callia es la Dos Mil Doce y fue elaborada de un corte que combina dos uvas importantes en la región: Shiraz y Malbec. La primera, es una variedad muy adaptada al desierto, por lo que aporta buenos aromas y texturas suaves. La segunda, Malbec, desarrolla principalmente buenos trazos frutales y una estructura media, que combinada con el Shiraz resultan en un tinto envolvente, dulce, de cuerpo medio y grato final frutal.

Esperado de Callia es un vino diferente, de sabor frutado y estilo innovador que abre el camino a nuevos consumidores. Para ellos, también concluye ahora su larga espera. Llega un nueva categoría de vinos, llega Esperado de Callia al mercado.

LA IMAGEN ES TODO
Bodegas Callia ideó para Esperado una estética innovadora, apostando por colores llamativos y de alto contraste –como el rojo y el negro recortados sobre fondo blanco- y empleando la “e” de Esperado como isologo impresa en la etiqueta sobre una clip art de hojas, consigue una imagen rupturista y a la vez cercana, más propia del diseño gráfico actual que de las etiquetas de vino.

Esperado de Callia se presenta en botellas de 75 cl. y se comercializa a partir de agosto en vinotecas y supermercados de todo el país.