Inicio Clickeando ¿Qué es la “alta miopía” y cuáles son sus mejores tratamientos?

¿Qué es la “alta miopía” y cuáles son sus mejores tratamientos?

La miopía es un defecto de refracción que produce que quienes la padecen tengan dificultades para enfocar correctamente objetos que están ubicados a una larga distancia; afecta la visión lejana. La misma se mide en dioptrías según su nivel de desarrollo. A mayor miopía, más dificultad tiene el paciente para ver de lejos, siendo también comprometida la visión de media distancia y en los casos de más alta miopía, también la cercana. Por lo general, cuando este defecto óptico es leve, suele corregirse con anteojos o lentes de contacto; que son elementos de ayuda visual, pero no corrigen en forma permanente la patología. La alternativa de corrección definitiva son las cirugías láser ó de lentes intraoculares.

Se denomina alta miopía cuando ese defecto de refracción supera las 8 dioptrías. Esta patología, que afecta aproximadamente a un 2% de la población, conlleva una mayor predisposición a padecer ciertas enfermedades oculares como: desprendimiento de retina, degeneración de la retina central por placas de atrofia, crecimiento de vasos por debajo de la retina en el área macular, el agujero macular miópico y separación de las capas de la retina macular. Estas pueden generar una discapacidad visual importante y afectar la calidad de vida del paciente, especialmente cuando se declaran en edad laboral.

Las causas de la alta miopía están relacionadas con una deformación del globo ocular que es demasiado alargado o bien a que la córnea es más curva que lo normal. Y en la mayoría de los casos, esta deformación está incidida por los antecedentes familiares. No existe una edad específica en la que puede comenzar a manifestarse, por lo cual afecta tanto a niños como adultos.

Para identificar si el paciente padece de alta miopía, además de las mediciones precisas que puede hacer el oftalmólogo, existen una serie de síntomas que son comunes: además de la elevada dificultad para enfocar los objetos que están a cierta distancia suelen verse líneas onduladas o manchas opacas en el campo visual; además de una pérdida de agudeza visual.

En cuanto a los tratamientos, por tratarse de una miopía elevada, la utilización de elementos de ayuda visual (anteojos y/o lentes de contacto) suele ser poco conveniente; ya que quien padece alta miopía precisa de la corrección permanentemente. Las lentes de contacto son una eficaz y valedera opción para la alta miopía; no así los anteojos aéreos, dado que son difíciles de tolerar por parte del paciente y la calidad de la visión con ellos suele no ser muy buena. También suelen desaconsejarse las cirugías láser en las capas superficiales y/o internas de la córnea, que son muy efectivas para la corrección de miopías leves y moderadas. En estos casos de alta miopía lo más recomendable son los implantes de lentes fáquicas (también conocidas como intraoculares fáquicas) entre la córnea y el cristalino, que corrigen la ametropía dentro del ojo.

Existen dos tipos de lentes fáquicas para la corrección quirúrgica de la alta miopía: los de cámara anterior (ARTISAN o de sujeción al iris; entre éste y la córnea) y los de cámara posterior ubicados entre el iris y el cristalino (ICL). Será el profesional quien deba determinar, en conjunto con el paciente luego de su evaluación, cuál de ellos es el más adecuado para cada caso. Ambas lentes son una muy buena alternativa. Siempre se debe realizar un exhausto examen preoperatorio, con especial énfasis en el control de la retina, el punto más frágil en el ojo miope. Estas intervenciones de colocación de lentes fáquicas son totalmente indoloras y tienen un posoperatorio corto; permitiendo al paciente retomar sus actividades habituales a la brevedad, manteniendo ciertas precauciones.

En cuanto a la prevención, no existen conductas que ayuden a evitar la alta miopía; pero cabe destacar que las revisiones oculares periódicas pueden colaborar a su diagnóstico precoz y la implementación de un tratamiento efectivo. Es importante resaltar que en los pacientes con esta patología es fundamental que acudan regularmente a los controles oftalmológicos, para comprobar que no haya lesiones en la retina asociadas a las enfermedades que este padecimiento les causa una mayor predisposición a desarrollar.