Sharp anunció el desarrollo de un televisor de pantalla de cristal líquido (LCD) que, según la firma japonesa, será el más plano y liviano del mundo y contará con una calidad de imagen enriquecida.
Los televisores convencionales de 52 pulgadas de Sharp miden 8,1 centímetros de ancho y pesan 30,5 kilogramos. En cambio, el nuevo dispositivo tiene un ancho de 2 centímetros y pesa 25 kilos. Además, consume la mitad de la energía que los actuales modelos.
Sharp, el tercer productor mundial de televisores LCD por detrás de Samsung y Sony, no quiso hacer comentarios sobre el precio del nuevo modelo, pero dijo que espera comenzar su producción masiva en marzo del 2010.