La próxima apertura del supermercado Changomas de la cadena Walmart despertó una amplia expectativa laboral en esta ciudad, pero con un mayor nivel de exigencia en cuanto a la oferta de recursos humanos. Tendrán más chances sobre todo, quienes posean experiencia en el rubro comercial y conocimiento técnico avanzado.
La búsqueda específica y acotada a un centenar de vacantes colmó los registros del Servicio de Intermediación Laboral (SIL) que funciona en la comuna local.
Se anotaron 400 personas cuando en la práctica, la firma pretende cubrir desde setiembre próximo, 14 puestos gerenciales y 85 del plantel que suele ingresar por el Convenio Colectivo de Trabajo.
Algunos cargos demandaron competencias como graduados terciarios o universitarios en relaciones laborales, recursos humanos, administración de empresas, técnicos o licenciados en Bromatología, Seguridad e Higiene, en electromecánica o enfermería. La próxima prueba será el trabajo que demandará atender una solicitud de Diarco, que invertirá en Viedma y generando fuentes de trabajo para medio centenar más.
“Este fenómeno no tiene precedente porque antes no existía una práctica a responder a este tipo de demandas tan específicas”, afirmaron el director de Desarrollo Económico, Pedro Rivera Oliver, y la coordinadora del SIL, Lara Umérez. Más allá de las exigencias, se logró cubrir los pedidos con recursos humanos locales, al punto tal que algunos ya se encuentran en la etapa del examen preocupacional.
Este organismo de empleo comenzó a consolidarse hacia 2007 con una base de datos integrada por alrededor de 1.500 personas. La mayor cantidad de empadronados lo componen el grupo etario de entre 18 y 30 años, y un segundo sector de entre 25 y 40 años que busca agotar la instancia de volver a trabajar. En forma previa, a quien busca una oportunidad laboral se le toma una entrevista. En esa dependencia tienen ocupados los turnos hasta octubre próximo.
Estos nuevos hábitos en la selección de personal dejó en claro dos mecanismos diferentes. Por un lado, que el Estado provincial sigue siendo un empleador con menos rigurosidad, mientras que el privado ya reclama un perfil de calidad en cuanto a su nivel formativo se pone como requisito no sólo tener conocimiento en informático sino también hablar un segundo idioma.
Los directivos de la comuna destacaron que “se comenzó administrando los recursos humanos que cubrían los programas sociales, aunque se abrió a la comunidad tratando de plantear un mejoramiento en la empleabilidad y un servicio con calificación desde lo cuantitativo y cualitativo, con orientaciones de carácter gratuitas”.
