Tiene un diseño que no pasa inadvertido, una presencia imponente y muchísima tecnología de punta. Sin embargo, si tuviera que definir al Citroën C6, el auto insignia de la marca del doble chevrón, diría que hay pocos modelos en el mundo que ofrezcan tanto confort de marcha. Ofrece, sencillamente, una maravillosa manera de viajar en automóvil.
Se comercializa en nuestro país con dos motores; un V6 naftero de 215 CV de potencia máxima y un V6 turbodiesel de 208 CV, versión esta última que manejamos.
La combinación de un motor deslumbrante con una caja automática, con opción secuencial, sumados a un chasis que, como es costumbre en Citroën, se destaca por su comportamiento, da como resultado una berlina que sin duda está entre las mejores del mundo.
Aun sin tratarse de un modelo deportivo, pudimos conducirlo en un autódromo donde sorprendió la capacidad de respuesta en curvas de distinto radio y velocidad. Es cierto, las suspensiones no tienen la firmeza de un supersport, pero el auto demuestra que es confiable ya que siempre mantiene la trayectoria elegida.
Es cuestión de superar la sensación que otorga un ligero rolido de la carrocería, pero que no conspira contra el comportamiento dinámico.
Además, las suspensiones tienen un comportamiento inteligente capaz de adaptar la altura de la carrocería a las condiciones de la conducción; más baja a altas velocidades y con mayor despejo en superficies más desparejas, donde se requiere conducir más despacio.
El nivel de equipamiento es tan alto que se necesita mucho espacio para detallarlo, pero como ejemplo basta decir que tiene 9 airbags, incluyendo el de rodilla del conductor; proyección de datos sobre el parabrisas, faros direccionales de bixenón.
El diseño es funcional a lo que se pretende: sumamente aerodinámico, el C6 HDI acelera de 0 a 100 km/h en menos de 9 segundos y supera los 225 km/h de velocidad máxima. Además, el espacio interior para todos los pasajeros es sobresaliente, tanto como la calidad de los materiales y las terminaciones. De definitiva, se trata de un auto que compite sin complejos frente a los grandes sedanes alemanes: Mercedes Clase E, BMW Serie 5 y Audi A6. Claro que hablamos de palabras mayores: subirse al C6 HDI cuesta 340.500 pesos.
