Las organizaciones cambian con los tiempos y sus estructuras requieren de un cambios y adaptaciones en su dinámica comunicacional, en muchos casos son organizaciones nuevas que ya se inician con una estructura moderna, en otros casos se van adaptando a los cambios de forma más o menos exitosa, pero el cambio es ineludible.
Estos cambios traen con ellos modificaciones en los roles y en las formas, los líderes de antes tenían características diferentes a los de hoy en día. En las organizaciones modernas para que un líder pueda comunicar bien tiene que entender el concepto de “conversación organizacional” y aceptar algunas nuevas realidades tales como:
1. Las estructuras son mas chatas y menos jerárquicas por lo que todos los empleados, especialmente los de la primera línea, están más involucrados en agregar valor por lo que la comunicación lateral y de abajo hacia arriba pasa a ser esencial. Esta es una característica que le aporta dinamismo a la organización, pero es importante que los líderes fomenten la participación y sepan guiarla.
2. El mundo global: los empleados son más diversos y están dispersos, en culturas y geografías distintas que presentan nuevas complejidades y requieren interacciones más fluidas e inmediatas.
3. El cambio generacional: las nuevas generaciones esperan que sus pares y superiores se comuniquen con ellos en un modelo de doble mano y más dinámico. Esta forma de comunicarse es esencial y ambas partes debe entender este “idioma” para que la comunicación sea fluida y exitosa.
4. Los cambio tecnológicos: redes digitales y las plataformas sociales son cada vez más comunes, por lo que los viejos sistemas o canales de comunicación ya no son utilizados, son obsoletos.
Los líderes jóvenes manejen estas variables naturalmente, quienes se iniciaron en estructuras menos modernas van a tener que adaptarse rápidamente para lograr comunicarse con éxito en este tipo de organizaciones más modernas, los que se resistan a los cambios probablemente se enfrenten con conflictos que perjudiquen el trabajo y la evolución del equipo. Este es un desafío importante para quienes no son nativos digitales y requiere de agilidad, apertura y entusiasmo para enfrentar nuevas formas comunicacionales.
