La búsqueda de soluciones de ahorro energético o uso eficiente de los recursos es una necesidad imperiosa para cuidar el planeta y a nivel individual, para reducir el monto de la factura que llega a fin de mes.
A continuación le brindamos algunos consejos de utilidad para ahorrar energía:
1) Pinte su casa con colores claros y luminosos. En los ambientes donde desarrolle un mayor trabajo visual (estudio y cocina), utilice colores que tengan un índice mayor al 70% de reflejo de luz. Aquí algunas referencias de guía:
Color | Porcentaje |
Blanco | 80% |
Marfil | 77% |
Amarillo | 74% |
Rosa | 70% |
Beige | 68% |
Gris Claro | 64% |
Amarillo limón | 62% |
Dorado | 53% |
Gris mediano | 44% |
Naranja | 34% |
2) Reemplace las lámparas incandescentes por lámparas fluorescentes compactas. Esta sustitución representa un ahorro de energía de 50% a 75%, lo cual se verá reflejado en su factura. Los márgenes de ahorro que ofrecen estas lámparas medidas en watts para brindar la misma prestación o intensidad lumínica son los siguientes:
Incandescente | Fluorescente Compacta |
100 W | 26 W |
75 W | 20 W |
60 W | 13 W |
40 W | 11 W |
Adicionalmente se suman otros beneficios como la mayor duración (hasta 10 veces más que las lámparas incandescentes), aportan mayor iluminación y menos calor.
3) Evite encender lámparas durante el día. Aproveche al máximo la luz natural, fíjese en la posibilidad de instalar tragaluces o ventanas en su hogar donde reciba luz directa.
4) Compre sólo lámparas fluorescentes compactas de marca y que tengan los certificados de aprobación de su calidad. Preste atención con la tonalidad de la luz. Adquiera las lámparas de etiqueta de “luz cálida” o “luz amarilla”, ya que es el tipo de luz que mejor reproducción de color ofrece.
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Fuente: Carlos Pera, Comité Organizador BIEL Light+Building