Para muchos profesionales, pertenecer a una empresa familiar significa ser parte de un gran emprendimiento, donde los roles están bien limitados y el sentido de pertenencia a ella es bastante fuerte. Sin embargo, el integrarse en una organización de estas características puede traer una serie de factores que deberían ser analizados antes de tomar una decisión.
Trabajando.comrealizó una encuesta a más de 2.800 usuarios, para comprender desde los propios protagonistas, cómo se viven los negocios familiares por dentro. A la pregunta inicial, un 72% de los encuestados dice no pertenecer a un negocio familiar, mientras que sólo un 28% dice ser parte de uno.
El 64% de quienes no pertenecen a un negocio familiar, aseguran que le gustaría integrar uno, mientras que un 36% de ellos dicen no estar interesado.
Según el Instituto de Estudios Superiores de España, IESE, al año 1998, un 75% de las organizaciones familiares transitaban en la 1ra generación, el 16% en la segunda, el 8% en la tercera, y sólo un 1% llega a la 4ta generación.
No muy lejano a las estadísticas de ese entonces, el sondeo realizado arrojó que el 63% de los negocios familiares a los que pertenecen los encuestados, apenas llevan una generación, mientras que un 30% pasa por la segunda, y sólo un 7% logra alcanzar a la tercera.
Con respecto a los aspectos que posee este tipo de negocios, el 36% de los encuestados aseguran que la característica más positiva que encuentran es la unidad familiar, ya que ésta puede soportar con mayor facilidad las etapas difíciles en las empresas. A su vez, un 20% dice que este tipo de negocios es efectivo debido a que, por lo general, existe un mayor compromiso por parte de los jefes y gerentes, y un 17% dice que se puede desarrollar con mayor facilidad objetivos comunes. Finalmente, un 14% afirma que lo más positivo es que está todo fundamentado sobre los valores de la familia, y un 13% dice que el manejo de las finanzas es más consciente.
Por otro lado, el 64% de los trabajadores que forman parte de un emprendeimiento familiar, aseguran que lo más difícil es el manejo de conflictos, ya que éstos pueden tornarse complicados cuando se involucran emociones y sentimientos, un 25% dice que es la falta de diversificación, un 7% la planificación de la sucesión y el 4% restante asegura que es la división de las ganancias.
Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com Argentina señala que, “es necesario tener presente, que pertenecer a una empresa familiar trae un mayor desafío a las personas, por ejemplo, el lidiar con un determinado clima laboral; tener que presenciar conflictos internos, que en este caso son mayores, porque la confianza que existe entre los miembros podría derivar en ciertas tensiones o desacuerdos, sobre todo por las distintas generaciones que allí podrían convivir”
Finalmente, a la pregunta, ¿hubieras preferido dedicarte a otra cosa? El 60% de los encuestados que trabajan en una empresa familiar afirman que les hubiese gustado trabajar en otra cosa , mientras que un 40% parece estar satisfecho con su actual lugar de trabajo.
“Al momento de postularse a un empleo es necesario considerar de qué característica es la empresa y evaluar si las capacidades, los deseos personales, intereses y metas concuerdan a esta organización, principalmente porque existen empresas, más aún las de características familiares, que suelen ser más estructuradas en torno a lo que requieren, permiten y exigen a sus trabajadores.”, agrega Molouny.
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