Inicio Empresas y Negocios El agro y las bodegas atraen a los bancos

El agro y las bodegas atraen a los bancos

Nadie en el sector financiero quiere quedarse afuera del buen momento que atraviesa la agroindustria. El nuevo modelo argentino surgido en 2003 la tiene como a uno de sus máximos exponentes, ya que constituye hoy uno de los motores que más impulsa a la economía nacional y las proyecciones indican un largo plazo venturoso.
Hoy, el 60% de las exportaciones totales corresponden al agro, así como el 44% de los aportes tributarios. Asimismo, es un activo generador de empleo, por cuanto concentra el 36% de la mano de obra nacional.
Este protagonismo se refleja en las provincias, según se desprende de un informe de la Fundación Mediterránea, nadie quiere quedarse fuera de la movida y los bancos regionales no desean ser la excepción. Al menos, esto se desprende de las estadísticas que manejan distintas entidades financieras y las diferentes estrategias que adoptan para ganar participación dentro de ese negocio.
Por caso, el Santander Río observa este fenómeno de una manera particular. En esta entidad, de enero a junio, la cartera de empresas agropecuarias creció un 23% en el país.
Según dijo Pablo Bullrich, gerente Agropecuario del Santander Río, al diario mendocino Los Andes, “estar en la Argentina, ser un banco, tener el 40% de sucursales en el interior y no hacer ‘agrobusiness’, sería dejar pasar una oportunidad en este mercado tan competitivo”.
“Todo depende de todo. Ningún banco que quiera ser de los principales puede no tener vinculación con el negocio agropecuario”, destacó el ejecutivo del Santander Río. Para esta entidad financiera, la preponderancia de la agroindustria no deja margen para la duda: representa el 58 por ciento de la cartera de empresas de Cuyo, mientras la Minería y Petróleo tienen una incidencia del 22% de esa cartera.
Esta realidad también la disfruta el flamante Standard Bank, de capitales sudafricanos (el antiguo BankBoston). Desde hace dos temporadas, la entidad financiera se fijó como uno de sus principales objetivos ganar penetración en el segmento vitivinícola. “Queríamos transformarnos en un banco referente del sector. Conseguir como clientes a las bodegas y a toda la gama de productores que son sus proveedoras”, señaló Pablo Mata, gerente de Interior Zona Oeste del Standard Bank.
Como nadie se atreve a discutir el rol de privilegio que ocupa el agro argentino para el mundo de los negocios, no extraña que los bancos tengan especial interés por el avance de este sector. Esto se refleja también en la evolución de los préstamos otorgados, en la creación de tarjetas de crédito específicas y en la aparición de entidades financieras que, hasta hace poco tiempo, no tenían al sector como a uno de sus objetivos comerciales prioritarios.