A pesar de que estamos en la época del año donde las expectativas aumentan por lo que puede llegar a ocurrir con la cosecha de los cultivos sudamericanos, y esto genera fuertes vaivenes en los valores de los granos, debemos considerar este año nuevos motivos que influyen notablemente en la conformación de los precios de los productos agropecuarios. Como año a año se agregan nuevos “jugadores” que participan comprando o vendiendo comodities agropecuarios -aunque más no sea en papeles-, las decisiones que toman los fondos de inversión influyen demasiado en el rumbo de los precios de los granos y subproductos. Y como estos buscan resguardo de los dineros de los inversores, muchas veces, al analizar que comprar y que vender, posan sus ojos en variables que habitualmente no mirarían los operadores y analistas del sector. Por eso, por estos días, lo que ocurre con las cotizaciones de los metales, los hidrocarburos y las monedas influyen fuertemente en las decisiones de los inversores, sin tener en cuenta -muchas veces- que pasa con las producciones, oferta, comercio y consumo de los principales productos del campo. Y ante tanta “imprevisibilidad” de los valores, lo mejor es buscar garantizarse los precios de alguna forma. Aquí aparecen los mercados de futuros como una buena opción para tratar de tener certeza de los valores a los cuales podemos vender o comprar en las diferentes épocas del año. En el Mercado a Término de Buenos Aires, ya se encuentran abiertas las posiciones de todos los productos para el año 2009. Esto significa, que hoy podemos comprar o vender soja, girasol, maíz o trigo que todavía ni está sembrado, y lógicamente menos cosechado. Así podemos intentar asegurarnos los valores a los cuales podré vender mi posible cosecha o comprar mis necesidades de suministros para la fábrica, o cubrir canjes de granos o gasoil, y muchas otras alternativas diarias de comercio que realizan todos aquellos que tienen algo que ver con el campo. Y si Usted duda de cómo se realizan las operaciones, quién las garantiza, si es un mercado confiable, si vale la pena intentar operar en ellos, etc, lo más aconsejable es acercarse a su acopiador, cooperativa o corredor amigo, que ellos bien podrán explicarle y asesorarlo sobre este tema. Los productores argentinos utilizan con gran agilidad las últimas tecnologías, las mejores semillas, los fertilizantes y agroquímicos más apropiados, los modernos seguros agropecuarios, pero a algunos todavía les falta ser más dinámicos en lo que respecta a la comercialización de sus producciones. A no perder el tiempo, que los “futuros” ya son parte del presente del dinámico campo argentino.
