A la vanguardia en investigación y especialización continua sobre enfermedades de alto riesgo, el Sanatorio de los Arcos dictó en abril pasado el curso de teoría y práctica de Neurocirugía Endovascular destinado a las Malformaciones Arterio Venosas Cerebrales (MAV) con Onyx. Se trata del primer curso de estas características realizado en Buenos Aires en el cual se intervinieron dos pacientes portadores de esta patología con un resultado exitoso.
El Onyx es un agente oclusivo que sella las MAV en forma progresiva y prolongada, y en casos indicados produce una oclusión más extensa que otros polímeros líquidos, reduciendo el riesgo de ruptura y hemorragia cerebral. Se aplica a través de un micro catéter que se localiza en una de las pequeñas arterias que vascularizan la MAV, por medio de una punción realizada en la arteria femoral a nivel de la ingle.
El Sanatorio de los Arcos dispone de recursos humanos y tecnología adecuada para la realización de este tipo de intervenciónes: Angiógrafo Digital con Reconstrucción Tridimensional y Tomografía Computada incorporada, Microscopio Quirúrgico de alta resolución, Neuronavegador y Resonancia Magnética Nuclear.
El Curso estuvo a cargo de los Doctores Héctor Luis Giacobbe y Martín Sáez del Servicio de Neurocirugía y Neurocirugía Endovascular del Sanatorio de los Arcos y con la colaboración del Dr. Jorge Mrad, Jefe del Servicio de Hemodinamia del mismo Sanatorio. Además contó, como Profesor Invitado, con la presencia del Doctor José Tevah, Neurointervencionista del Hospital de Clínicas de la Pontificia Universidad Católica de Santiago de Chile.
¿Qué son las Malformaciones Arterio Venosas (MAV)?
Las Malformaciones Arterio Venosas Cerebrales (MAV) son enfermedades vasculares congénitas que consisten en la formación de una fina red de vasos anormales conectados entre las arterias y las venas. Presentan un aumento de la velocidad circulatoria local y de la presión sanguínea en las arterias y venas cerebrales. Pueden producir cefaleas, convulsiones y hemorragias severas por ruptura vascular; dando lugar a un Ataque Cerebral o Accidente Cerebro Vascular Hemorrágico, con el potencial riesgo de vida o discapacidad permanente. Esta sintomatología ocurre con mayor proporción en la adolescencia.
Las posibilidades de que una hemorragia se declare en el transcurso de la vida del paciente son potencialmente altas por lo que se recomienda el tratamiento quirúrgico de esta enfermedad. Tres son las posibilidades quirúrgicas: La Neurocirugía con resección de la MAV; La Neurocirugía Endovascular con oclusión de la MAV por medio de cateterismo selectivo; y la Radiocirugía que, por medio de radiación localizada, produce trombosis progresiva de la MAV. Según el tipo de MAV se indica una de las alternativas quirúrgicas mencionadas o la combinación de las mismas, con el fin de lograr el éxito terapéutico con disminución del riesgo.
