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ERP 2.0, una evolución necesaria en plataformas de negocio

Los sistemas ERP han sido un aporte valioso a la gestión de empresas, agregando capacidades de planeamiento y control en forma sistematizada, mejorando mecanismos propietarios o insuficientes. Sin embargo, muchas veces han requerido para su implementación y actualización muchos recursos humanos y largos períodos de trabajo, lo que dificultó su evolución y su ampliación funcional.

Gracias a la tecnología Web y a la conectividad disponible han comenzado a surgir nuevos paradigmas de software ERP que solucionan esos problemas, pues están estructurados en forma más flexible, con tecnología y arquitectura que favorecen la implementación y la posibilidad de agregar todo un universo de aplicaciones disponibles a través de conectores web (web services).

Estos beneficios sumados a la integración que brindan con toda la cadena de valor en la que participa una empresa hacen que sea más rápido, seguro y beneficioso implementar nuevas soluciones de negocios de este tipo que las de tecnologías más antiguas. Las tiendas de aplicaciones de negocio serán seguramente la próxima etapa de esta evolución.

Los sistemas ERP nacieron a inicios de los noventa como propuesta de valor para las empresas que utilizaban para su gestión soluciones propietarias, a menudo muy costosas y de baja capacidad de evolución.
A lo largo de su existencia fueron migrando de tecnología, pasando de interfases de caracteres, a veces sin motores de bases de datos y de desarrollo monolítico, a soluciones gráficas, más abiertas, que permitían un entorno de desarrollo para terceras partes o para la propia empresa, lo que les daba flexibilidad y mayor velocidad de introducción de mejoras.

La evolución de las plataformas fue agregando funcionalidad en nuevas áreas, tales como Inteligencia de Negocios, Manejo de cadena de abastecimiento o Recursos Humanos, Gestión de relacionamiento con clientes, entre otras. Esas prestaciones fueron sumándose en forma integrada, como extensiones funcionales.
El paradigma tecnológico de estas plataformas ha sido durante los noventa el de cliente-servidor, con mayor o menor grado de sofisticación técnica, de acuerdo al nivel de desarrollo y tipo de empresas objetivo de cada una.

Los ciclos de actualización de esas soluciones se contratan vinculados al servicio de atención al cliente. Sin embargo, como la arquitectura es monolítica, las actualizaciones no siempre son utilizables de inmediato si se realizaron customizaciones específicas.
Muchas empresas que no migran de versión por años por el costo involucrado en esos casos.

En definitiva, los ERP de los noventa si bien han agregado muchísimas mejoras a la gestión empresarial, han tenido históricamente dificultades en su implementación y evolución: costosas puestas en marcha, dificultades de migración, poca flexibilidad relativa para el cambio.

En ese contexto, nacieron a partir de 2000 dos tipos de plataformas de gestión de negocios basadas en la web. Por un lado herramientas de negocios en modelos de uso inmediato, generalmente onDemand , o sea usables desde los servidores del proveedor de la solución, y por el otro plataformas ERP que permiten modelos de implementación más simples, porque tienen mayor poder de integración y vienen de un paradigma de desarrollos de soluciones más modular, el de servicios de software que se pueden usar en forma individual o en procesos que integran varias aplicaciones en su recorrido. Nada de eso sería posible sin la tecnología web y los paradigmas que trajo. El modelo de webServices, la implementación técnica de esta forma de pensar las aplicaciones, es la cara visible de las mismas.

En cuanto a integración, éstos son algunos ejemplos de los mecanismos que proveen las aplicaciones ERP 2.0: el login orquestado con el servicio de mail, el acceso compartido a documentos en la web, la integración en un BPM de procesos que recorren varias aplicaciones, no sólo las que provee el desarrollador del ERP. En cuando a prestaciones, la propia naturaleza de su arquitectura los hace más fáciles de preconfigurar. Hoy es habitual que un ERP 2.0 sea verticalizado para necesidades puntuales de la industria sin perder calidades genéricas, pero agregando especialización, y con un costo de implementación sustancialmente menor.

Al ver los modos de uso, el modelo OnDemand que proveen los hace especialmente interesantes para escenarios donde no se desea poner a disposición una infraestructura propia de servidores, ni los costos relacionados con su mantenimiento. Además, ese modelo permite también acortar sustancialmente los plazos de implementación.
Y simultáneamente, el modelo de upgrade es notablemente distinto. Las tecnologías Agile que típicamente se hayan vinculadas a estas nuevas plataformas hace que la actualización no sea un trabajo en sí mismo:
es habitual que los ciclos de upgrade estén embebidos en el update, y por lo tanto no se requieran estrategias costosas de migración de versión.

Finalmente, otro aspecto que suelen agregar las plataformas web es un modo de uso, relacionamiento interno y gestión del conocimiento más afín con todas las tecnologías que se maneja en el ámbito personal, porque tienen paradigmas de uso semejantes a las redes sociales o plataformas de servicios que toda persona de estos tiempos usa en su ámbito personal. Lo que agregan en esos casos es un repositorio centralizado de información, mejores herramientas de comunicación interna pero dentro de un flujo de trabajos racionalizado para optimizar la gestión de la empresa.

Las plataformas basadas en Web y de tipo ERP 2.0 están creciendo en forma acelerada, reemplazando los sistemas ERP cliente-servidor de la década del noventa y permitiendo ahorros de costos y flexibilidad de operaciones no imaginadas unos pocos años atrás. Están creando ecosistemas de aplicaciones que reemplazan modelos monolíticos de construcción de soluciones, para permitir la incorporación de mejoras provistas por una comunidad de fabricantes de software. Las tiendas de aplicaciones serán el próximo paso en que las tecnologías de uso personal sean asimiladas en el contexto de aplicaciones de empresas, una tendencia que ha sido iniciada a partir de las innovaciones para el consumidor de Apple, Google y Amazon, entre otros.