Ayer el empresario Horst Paulmann aumentó su participación de 63,69% en la propiedad de Cencosud tras adjudicarse, mediante una subasta en la Bolsa de Comercio de Santiago, un porcentaje del paquete accionario que mantenía el grupo peruano Wong. Los 49,75 millones de títulos, equivalentes al 2,28% de la propiedad del gigante del retail, fueron colocados por el banco de inversión LarrainVial y rematados a un precio de $2.055 por acción, lo que le significó al grupo peruano recaudar unos US$200,8 millones.
Manuel Bulnes, gerente general de LarrainVial Corredores de Bolsa, indicó que si bien uno de los principales objetivos de colocar este paquete era incorporar socios extranjeros –y por eso que un 75% de la demanda corresponde a un libro de clientes de primer nivel– “después se optó por dar de forma pareja a todos los demás inversionistas, es decir, que el grupo controlador se llevó lo mismo que el resto de los accionistas”.
La otra parte del paquete, según precisó Bulnes, fue adjudicado por inversionistas institucionales de América Latina, EE.UU. y Europa.
De hecho, comentó que “esta es la culminación de un proceso de colocación en el cual se hizo un esfuerzo en Chile y el exterior, “se visitaron a más de 80 clientes institucionales extranjeros y chilenos, así como personas”, comentó Bulnes.
La demanda por los papeles llegó a casi US$500 millones, y el precio de adjudicación fue levemente superior al valor en que la demanda competitiva del libro de subastas se completó.
Del total del paquete, los fondos institucionales extranjeros quedaron con un 28,87%, con una prorrata única de un 75%, mientras que el resto fue para fondos locales, empleados y directores de Cencosud, con una prorrata de 48,51%.
El porcentaje adquirido por Paulmann, según explicó Bulnes, implica que este no tendría que lanzar una OPA, ya que no aumentaría el control sobre Cencosud a más de dos tercios de la empresa.
Por otra parte, la provisiones por $64.698 millones que hizo Cencosud en septiembre de 2009 debieran revertirse. Esto se hizo en caso de que debiera cubrir la diferencia que se produciría si el precio por acción durante el remate era inferior a $2.000, ya que según el acuerdo entre las partes, de ocurrir aquello el retail chileno debe pagar por el diferencial, ya que cuando el grupo liderado por Paulmann entregó las acciones a los Wong, éstas se transaban en torno a los $2.010 cada una.
