La directora general de Aduanas, Silvina Tirabassi, aseguró que el Gobierno “aplica una fuerte política para proteger la industria nacional”, mediante el control de la “subfacturación y el fraude marcario” en transacciones comerciales exteriores, dado que “de 3.225 posiciones arancelarias que fijó la Aduana, 1.372 impactan en el sector textil”.
También aseguró que su organismo comenzó a trabajar en la capacitación de inspectores en el rubro textil, porque “en este sector es difícil de identificar” irregularidades y detalló que “la mayor eficacia que logra la Aduana para combatir la subfacturación es desarrollar un mayor detalle de las mercaderías”.
En igual sentido, señaló que días atrás recibió una invitación de la Aduana de China “para intercambiar información y obtener mejores resultados” en el control del intercambio de mercaderías.
Tirabassi se refirió de este modo durante su disertación en la cuarta Convención de la Industria Textil de Indumentaria y Diseño Argentino organizada por la Fundación Pro Tejer, en la que destacó que la Aduana “desde hace cinco años trabaja bajo un lema de mucho control y facilitación de las operaciones”.
Señaló, además, que durante julio pasado las exportaciones totalizaron 7.091 millones de dólares y las importaciones 5.226 millones, mientras que, de lo relevado en agosto, las ventas al exterior suman 4.414 millones y el ingreso de producción asciende a 3.450.
“La aduana era una organización exclusivamente técnica. Ahora, logramos aplicarle un carácter técnico-estratégico, mediante una articulación con el sector privado”, enfatizó la funcionaria.
Específicamente en la industria textil, de acuerdo con los datos oficiales, durante el primer semestre de 2008 se aplicaron 538 cargos de valoración, se registraron 125 denuncias de contenciones de valor y tres denuncias penales.
La directora general de Aduanas reconoció que el control de las importaciones provenientes de China en términos textiles “implica un esfuerzo mayor” respecto de otros rubros, “porque se trata de muchas unidades a un bajo valor”.
“Los resultados los medimos en términos de cómo responde la industria nacional con el aumento o disminución de la mercaderías facturadas”, explicó Tirabassi.
Subrayó, a su vez, que “mientras la industria nacional recuperó su producción, la Dirección General de Aduanas recuperó el rol como herramienta estrategia del gobierno nacional” y agregó: “No somos la policía del comercio exterior, sino que nuestro rol es la protección de la industria nacional”.
