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La Anónima crece en Chubut

El presidente La Anónima, Federico Braun, llegó a la ciudad acompañado por los gerentes Sergio Epherra y Eduardo Del Prette, además del gerente de arquitectura Marcelo Cardiff y mantuvo un encuentro con el jefe comunal Nelson Iribarren.

Braun anunció que en noviembre comenzará la construcción de la sucursal local de la cadena de supermercados, sumando de esta manera representación en 64 localidades en diferentes puntos del país.

Las obras se iniciarán casi sobre el fin de este año y junio es el mes probable para la inauguración. Con la apertura del local comercial se prevé la incorporación de unos 45 trabajadores que formarán parte del plantel directo de la empresa.

El área de ventas del supermercado tendrá mil metros cuadrados y las mismas características que tiene cualquier sucursal de La Anónima.

En el último mes hubo una serie de acontecimientos que fueron determinantes para que la empresa decida su radicación. Cabe recordar que la misma es esperada desde hace más de dos años, cuando la firma evaluó el terreno y luego adquirió tierras, pero nada más se supo desde ese entonces hasta esta parte.

El crecimiento demográfico alcanzó las expectativas de la empresa. “No puede haber supermercado si no hay gente”, dijo Braun al explicar las razones por las que finalmente decidieron desembarcar con la compañía.

Días atrás la municipalidad serrana envió a La Anónima (a pedido de una de las gerencias), un último informe socio-económico en el que detalla rasgos que se fueron dando desde el 2007, hasta la actual situación de Sierra Grande.

Allí detalla entre otros aspectos que el crecimiento se da en virtud del incremento en las matrículas escolares, la radicación de la Gendarmería Nacional, la toma de más personal en la Minera Sierra Grande, entre otras.

El edificio se construirá en el Centro Cívico, detrás de las oficinas del correo.

Hubo diferentes opiniones respecto del tema, pero Iribarren dijo que “no hay que tener miedo, ni abstenerse de comprar o elegir productos”. Un fenómeno que se da cada mes es el de los empleados, que al cobrar sus salarios viajan a ciudades vecinas para realizar sus compras en La Anónima.