La crisis que soporta la producción láctea nacional, cuyos principales actores frenaron un paro mientras esperan los resultados del encuentro que mantendrán el viernes el Gobierno y la Mesa de Enlace, se agravó este miércoles cuando los dirigentes conocieron la “casi definida” decisión de Chile de imponer fuertes aranceles a la compra de leche en polvo y quesos de fabricación nacional.
Consultores locales dejaron trascender que las autoridades del país trasandino anunciarían, en el curso de esta semana, la decisión de aplicar un arancel del 31,5% a la leche en polvo y a los quesos producidos en la Argentina.
La medida apuntaría a darle mayor protección al mercado lácteo local.
Aunque la decisión del Gobierno chileno se adoptaría para todo el contexto internacional, los países más perjudicados serían Argentina y Uruguay, a quienes los industriales chilenos acusan de vender “por debajo de los precios internacionales” y causar, de ese modo, “importantes pérdidas al sector”.
Las exportaciones en números
Según datos proporcionados desde Lechería Latina, Argentina ha logrado cerrar negocios relevantes con exportadores chilenos en lo que va de este año, concretando ventas de leche en polvo producida en el ámbito nacional.
Estadísticas elaboradas por la consultora y especialistas del sector indican que, si se comprara lo exportado en la primera mitad del año con relación al mismo período de 2008, “se exportó un 371% más de toneladas, llegando a las 2.356 contra las 500 toneladas exportadas durante los primeros seis meses del año pasado”, aunque aclaran que, “en contrapartida, el precio al que ha vendido nuestro país en este período bajó un 44 por ciento”.
Además, en el rubro de quesos, se advirtió un fuerte incremento en las exportaciones de este año, mostrando una suba del 15% respecto de 2008, aunque su valor una mermó 32 por ciento.
Efectos de la medida chilena
Desde la consultora alertaron que la medida de Chile “impactará en un mercado local de lácteos que se encuentra complicado”, en especial por los severos conflictos que enfrenta que están determinando una crisis terminal en la producción argentina.
De implementarse esa medida, se agregaría a las dificultades que ya tuvo el país para colocar lácteos en la plaza brasileña que, según referentes de la actividad exportadora, conserva “aristas irresueltas” para volver a optimizar las ventas del sector hacia ese país, informó la agencia de noticias DyN.
