Los empresarios están convencidos que la crisis financiera internacional tendrá un impacto en la economía argentina y pronostican que la desaceleración del consumo local se sentirá en el 2008 y se agudizará en el 2009.
Los comercios minoristas ya sintieron el efecto durante septiembre. La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) indicó que durante el mes pasado las cantidades vendidas registraron una caída de 8,7% contra igual mes del 2007 afectada por la inflación, la restricción crediticia y la crisis mundial.
Los especialistas de la entidad admitieron que las ventas en el noveno mes del año “volvieron a debilitarse” al verse”desalentadas por la inflación que continúa reduciendo la capacidad de compra de los hogares”, “la restricción del crédito, la incertidumbre provocada por el impacto que tendrá la crisis internacional en el país y el temor por la vuelta del campo a las rutas”.
“Los malos humores que llegan de afuera están haciendo que la gente posponga su decisión de compra”, resumió el presidente de la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA), Dante Alvarez, en declaraciones al diario La Nación.
En el último mes, las previsiones de ventas de 0 km pasaron de “un piso” de 620.000 unidades anuales a “un techo” de ese mismo nivel. Esta retracción del mercado local, sumada a las menores previsiones de ventas en los principales destinos externos, condujeron a que al menos la mitad de las terminales radicadas en el país decidieran recortar entre 15 y 20% sus horizontes de producción para los próximos meses.
“Estas a salvo del desastre pero no del freno a la actividad económica”, explicó este lunes el economista Miguel Bein en declaraciones a Radio 10.
Según la CAME, durante septiembre “no hubo ningún rubro que haya escapado al ajuste del consumo, con caídas muy fuertes en Calzados y Bijouterie, Indumentaria y también en Electrodomésticos, que fue la estrella del consumo de los últimos años”.
“La intención de compra de bienes durable bajó en septiembre, y eso se percibió en que cayeron fuertemente las consultas sobre precios y productos, y allí incidió la menor disponibilidad de crédito y las mayores tasas”, detalló el informe de la CAME.
“Frente a la incertidumbre, el público parece estar realizando un estricto control en sus gastos que se refleja ya no solo enproductos de valor, sino también en los electrodomésticos más pequeños”, añadió la Confederación
El sector inmobiliario aún no determinó si la crisis financiera traera costos o beneficios. El presidente de la Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal y Actividades Inmobiliarias (Caphai), Horacio Bielli, señaló como positivo que la gente traiga al país las inversiones que tiene en el exterior y “considere que un buen refugio para sus ahorros son los ladrillos”.
Sin embargo, Bielli también indicó que la crisis puede tener efectos negativos sobre los emprendimientos “premium” porque sus precios ya no serán mucho más tentadores que los que se puedan encontrar en Madrid, París o Nueva York, mercados con valores en baja, señala el matutino.
“Las ventas no cayeron, el proceso de venta se hizo más lento”, explicaron desde un grupo inmobiliario. En este sentido aclararon que “durante muchos años, pensaron, y de hecho era así, que con el dinero que obtenían de las ventas que se cerraban previo a que comenzara la construcción era suficiente como para llevar adelante el proyecto. Hoy la situación ya no es tan simple”.
