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La formación empresarial hoy

La gestión del factor humano debe asentarse sobre principios que permitan mejorar su rendimiento para con la organización. Para ello, se deberá trabajar en la generación de entornos laborales donde la flexibilidad y la motivación tengan un lugar preponderante. Esto permitirá que las personas se adapten plenamente a la organización y se integren positivamente a la misma.

En este contexto, los procesos educativos y formativos que las organizaciones brindan a sus empleados deben ser revisados a efectos de articularlos con el nuevo modelo organizacional imperante. En este sentido, la experta española, Trinidad Yera Cuesta dirá: “En las empresa de hoy en día, la enseñanza y el aprendizaje empiezan a parecerse más al modelo universitario que al modelo de la formación profesional.”

En el mercado actual, el hombre se ha convertido en el máximo responsable de su carrera profesional. Muy atrás han quedado aquellos momentos en que un trabajador ingresaba a una organización y, en ella, seguramente trascurría su devenir laboral. Este, es un dato esencial a tener en cuenta al momento de plantearse una estrategia de formación por parte de la dirección de management de las personas.

Entonces será bueno preguntarse qué valor adquieren los modelos de aprendizaje educativo que la organización pueda brindar a sus empleados. Cómo valorarán los trabajadores dicha opción. Cuál es la finalidad que tiene un proceso formativo en el contexto actual. Cómo se deberá estructurar un plan de capacitación. Dónde buscar los capacitadores.
Sin lugar a dudas, se trata de muchas incógnitas y difícilmente podamos dar respuesta a las mismas en el marco del presente. Sin embargo, trataremos de acercar un poco de luz al tema.

El desafío que presenta el momento actual, es poder establecer planes de capacitación que no solo ayuden al cumplimiento de los objetivos de formativos específicos, sino que además posibiliten generar mejores condiciones de aprendizaje permanente para cada uno de los empleados afectados. Dicho de otro modo, no se debe limitar la enseñanza a la adquisición de técnicas o destrezas específicas propias de la función, ya que se limita la potencialidad del alcance a un contexto próximo.

El departamento de capital humano debe orientar su plan de formación siguiendo las pautas del modelo universitario, un espacio que privilegia la formación integral y multilateral del ser humano por sobre la mera adquisición de conocimientos técnicos.

Esto mejorará la obtención de resultados y generará una mejor sociología organizacional, al contar con individuos con un amplio bagaje formativo que privilegie el entendimiento de equipo de trabajo y la traslación de habilidades colectivas.

Por último, siempre se debe recordar que cada realidad organizacional es distinta y que al momento de pensar en generar cualquier tipo de política en el área de recursos humanos; será necesario conocer previamente las necesidades específicas de su plantilla.