Inicio Empresas y Negocios Las tarjetas crecen de la mano de los que menos tienen

Las tarjetas crecen de la mano de los que menos tienen

Luego de la gran recuperación mostrada por el sector de tarjetas de crédito y débito entre 2003 y 2007, tanto 2008 como 2009 han sido años de desaceleración, pero de ningún modo de deterioro para un mercado que sigue con tendencia creciente, tanto en saldos como en parque de tarjetas.

Así lo señala el reciente estudio presentado por la Consultora Claves I! nformación Competitiva, que además sostiene que para las tarjetas de crédito “el mayor impulso al crecimiento viene dado por las tarjetas no bancarias, cuyos saldos crecieron por encima de la media del mercado”. Por otro lado, señala que “entre 2007 y 2009 también se observó una expansión de las tarjetas nacionales, preponderantemente Visa, emitidas por bancos generalistas”.

Ambos hechos se explicarían por la creciente saturación del mercado de tarjetas internacionales, que contrasta fuertemente con la cantidad de personas de niveles socioeconómicos más bajos que están siendo incorporadas al sistema, tanto por las tarjetas regionales, como por las entidades del Sistema Financiero Argentino.

Pero a pesar del notable crecimiento atribuido al segmento no bancarizado, se advierte que los saldos originados por las tarjetas de las entidades bancarias siguen explicando el 92.9% de los totales del sector. Esto se debe en gran parte a la d! iferencia entre los montos involucrados en las operaciones, sensibleme n te menores en el primer caso, y la alta ponderación de los saldos de las tarjetas internacionales.

La segmentación más habitual para las administradoras se da por alcance geográfico del plástico emitido, de modo que es posible distinguir tarjetas internacionales, nacionales, regionales, locales y de uso exclusivo en cadenas de retail.

Entre las primeras sólo encontramos cuatro empresas (siempre en orden alfabético) American Express, Diners, MasterCard y Visa; estas dos últimas también ofrecen versiones de uso nacional, a las que se suman Argencard, Cabal, Credencial y Nativa. Las regionales, entre las que se da la mayor atomización (son entre 100 y 120 empresas), sólo son admitidas en ciertas provincias o zonas y la mayoría es emitida por instituciones no bancarias, siendo el ejemplo típico Tarjeta Naranja; y finalmente las de uso exclusivo en cadenas de retail, aptas únicamente para una misma cadena comercial y en algunos casos, redes de comer! cios adheridos.

A junio de 2009 los plásticos se distribuían entre los segmentos mencionados de la siguiente manera: 42.05% para las internacionales, 21.59% las nacionales, 24.24% las regionales y el 12.12% restante para las cadenas de retail. Aunque las tarjetas internacionales ostentan la mayor participación, vienen perdiendo terreno lentamente, sobre todo frente al gran avance de las regionales.

El impulso de las tarjetas regionales estuvo motivado en alguna medida por la mayor confianza de los consumidores para contraer ciertas deudas, (aunque ahora, a diferencia del período pre-crisis 2002, la racionalidad es mucho mayor) y debido a la alta inflación que motivó en los usuarios la anticipación de compras en cuotas sin interés.

Además de un buen contexto general de crecimiento sobre todo el sector, incluso con una más que aceptable performance en 2009 en medio de pronósticos pesimistas, segmentos como las tarjet! as regionales y las tarjetas de compra de tiendas de consumo vienen ex perimentando desde 2004 resultados notables, gracias al avance sobre segmentos de clientes de ingresos medios y medios/bajos, y al desarrollo de mercados del interior del país.

En términos globales, las cinco empresas con mayor emisión de tarjetas (en orden alfabético: American Express, Cabal, Mastercard, Naranja y Visa) concentran el 76.4% del share

De acuerdo con el estudio, para el giro del negocio de las tarjetas de crédito y débito se estima un crecimiento interanual (2008/2009) del 18.5%, y de un 22% para el año próximo.

Las cinco principales tendencias estratégicas del sector

1. Para los próximos cinco años escenarios de crecimiento moderado y selectivo, con vista atenta a la salud de las carteras, en especial en el interior del país.

2. Crecimiento del mercado impulsado por la incorporación de clientes provenientes de sectores de ingresos medios bajos y bajos. Sobreoferta en el m! ercado ABC1 tradicional del producto.

3. Fortalecimiento de alianzas con canales por parte de todas las emisoras para la colocación de plásticos. Nuevas formas de comercialización por parte de bancos generalistas.

4. Intensificación de la rivalidad competitiva multisegmento, tanto del lado de las administradoras como de las emisoras. Bancos generalistas buscando captar clientes en sectores de ingresos medios – bajos, y tarjetas regionales diseñando productos para atraer clientes de ingresos altos.

5. Profundización de las alianzas entre las tarjetas regionales y las administradoras de bandera, incorporando los plásticos regionales a las redes nacionales. Creciente participación de bancos generalistas en tarjetas regionales y de segmentos de ingresos medios – bajos.