La mayoría de los bancos de la región prevé que superar los efectos locales de la crisis financiera global demandará entre uno y tres años, según una encuesta divulgada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban).
De acuerdo con el sondeo -realizado a fines de 2008- dos de cada tres banqueros opinaron que la crisis afectará a los mercados financieros de sus países durante uno a tres años.
La encuesta recabó las opiniones de más de 100 ejecutivos de bancos grandes, medianos y pequeños en 19 países de América latina y el Caribe.
Entre las consecuencias de la crisis, seis de cada diez banqueros coincidieron en anticipar una escasez de financiamiento para sus instituciones. Otros efectos esperados son menores ingresos de remesas en la región y una disminución en las operaciones de comercio exterior, consigna el diario La Nación en su edición de hoy.
Los bancos prevén que habrá menos crédito y tasas de interés más altas para las pequeñas y medianas empresas (Pyme).
Sin embargo, el 90% de los encuestados manifestaron que sus bancos continúan interesados en mantener o incrementar su apoyo a este grupo de compañías. Entre los servicios más habituales mencionaron capital de trabajo, líneas de crédito y liquidaciones de sueldos y pagos.
“Los bancos latinoamericanos, por lo general, están sólidos, solventes, líquidos, con baja morosidad, niveles de aprovisionamiento y adecuación de capital por encima de los niveles de los acuerdos de Basilea. Esto permitirá a los países y bancos de la región atravesar la crisis internacional en mejores condiciones que en el pasado”, expresó el presidente de Felaban, Ricardo Villela-Marino.
