Inicio Empresas y Negocios Los mayoristas reconocieron una caída del 10% en sus ventas de junio

Los mayoristas reconocieron una caída del 10% en sus ventas de junio

El consumo todavía no logró recuperarse de los efectos de la crisis del campo. Los comercios mayoristas advirtieron ayer que sus ventas registraron en promedio una baja interanual del 10% en junio como producto del conflicto entre los ruralistas y el Gobierno.

En el sector aclararon que, a diferencia de lo que pasó con el primer paro del campo, que provocó un proceso de desabastecimiento generalizado, en junio el impacto fue mayor en las expectativas de los consumidores, pese a que no se registró un faltante masivo de productos en las góndolas de almacenes y supermercados.

“Las ventas están un 10 por ciento por debajo del nivel habitual, especialmente en el interior, donde el conflicto del campo derivó en una ruptura de la cadena de pagos, de la que sólo ahora nos estamos recuperando”, explicó Alberto Guida, presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam), que ayer organizó su congreso anual.

El dirigente además alertó que tras la fuerte suba registrada en Semana Santa, no se produjeron aumentos generalizados en los precios de los alimentos, aunque advirtió que en el largo plazo la situación podría agravarse.

“Las limitaciones o prohibiciones a la exportación de alimentos, para enfrentar el encarecimiento de los precios, son perfectamente comprensibles, pero me temo que, salvo el efecto coyuntural o aparente, agravarán la carrera de los precios y provocarán operaciones especulativas”, sostuvo Guida.

La preocupación acerca de la evolución del consumo fue compartida por el presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Carlos de la Vega, quien también alertó sobre una desaceleración de las ventas minoristas.

Cautela en los chinos
“En junio estamos viendo una desaceleración del orden del 20 por ciento en las ventas frente a las tasas a las que veníamos creciendo, y en este sentido será importante ver lo que pasa en julio, para determinar si este problema se explica por el conflicto con el campo o por la inflación”, explicó De la Vega.

Un poco más cauta fue la visión de los autoservicios chinos, que prefirieron hablar de un “estancamiento” de las ventas, antes que de una baja en el consumo.

“Salvo algunos productos específicos, lo que estamos viendo no es una caída en las ventas, aunque sí hubo un parate importante en relación a cómo venía el mercado previo a la crisis del campo”, señaló Miguel Angel Calvete, secretario de Casrech, la cámara que reúne a la mayoría de los autoservicios chinos.

El dirigente destacó que la caída mayor se registró en la venta de aceites, aunque en este caso lo atribuyó a factores externos antes que al conflicto de las retenciones.

“Todavía no se normalizó la entrega, y desde nuestro sector estamos buscando acuerdos de entrega directa con la industria para poder evitar intermediaciones que encarecen el precio final del producto”, explicaron los chinos.