Inicio Empresas y Negocios Los supermercados ponen alarmas en los “alimentos premium” para evitar robos

Los supermercados ponen alarmas en los “alimentos premium” para evitar robos

Las clásicas alarmas que hasta hace sólo algunos meses se utilizaban en las casas de indumentaria o en las cadenas de electrodomésticos se están convirtiendo en algo común en los supermercados.

Fiambres, quesos, mantecas, vinos, frascos de champú, latas de atún y una larga lista de productos de uso cotidiano son protegidos por distintos dispositivos por los comerciantes. ¿La causa? Un sostenido aumento de robos en los supermercados.

“Nuestra sensación es que en los últimos meses la tendencia de hurtos ha ido en aumento”, sostuvieron desde la Cámara Argentina de Supermercados (CAS).

Desde la entidad, indicaron que la idea es que las alarmas, que en general se utilizan como códigos de radiofrecuencia, se coloquen en todos los productos. “Hoy se elige vigilar a aquellos que por la relación tamaño-precio son los más buscados”.

Pero ya se pueden ver no sólo en los vinos, aperitivos, pilas o máquinas de afeitar descartables, sino en productos de uso diario, que a raíz de la inflación han visto incrementados sus precios, convirtiéndolos en productos premium.

Los comerciantes, quienes se enfrentan día a día con esta realidad, no dejan de sorprenderse por el ingenio de los ladrones. “Se esconden alfajores en las capuchas y es muy común que se lleven un pan de manteca escondido en los puños de los buzos”, explicó la encargada de un supermercado en el barrio porteño de San Telmo. Y lo insólito es que en este local decidieron dejar de comercializar el leberwurst porque “se lo robaban siempre, ya no nos daba ganancia”.

Si bien siempre se dieron robos en aquellos productos pequeños que pueden esconderse, sorprende esta realidad en los lácteos. “Decidimos poner alarmas en los quesos de primera marcas, en los fiambres y hasta en los paquetes de quesos rayados, porque en los últimos seis meses la gente comenzó a llevárselos”, explicaron desde una cadena de supermercados, según consingó Ambito.

Esta nueva realidad se relaciona con la inflación y la suba de los precios. “Los quesos pasaron a ser un alimento premium ya que un trozo envasado cuesta entre $70 y $80 por eso decidimos vigilarlos más”, explicaron.

Los productos de higiene y belleza integran la lista de los más elegidos. “Descubrimos que se llevaban los pomos de tintura para el cabello y dejaban las cajas, por lo que tuvimos que colocar alarmas”, agregaron.

En muchos de los supermercados chinos aún no se utilizan alarmas, pero sus dueños controlan cada uno de los movimientos. Los vinos, el whisky y el fernet encabezan la lista, por eso suelen estar muy cerca de la caja. “Cada vez hay más gente dispuesta a llevarse cualquier cosa de los locales”, sostuvieron desde la CAS y sin lugar a duda la inflación que impacta de manera directa en los precios parece ayudar a que se produzcan estos delitos.