Los líderes de las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) en América Latina han identificado al medio ambiente, la educación, y la reducción de la pobreza como los problemas más graves de la región; mientras que señalan que internamente la compra de equipos, infraestructura y tecnología informática son las áreas con mayor necesidad de desarrollo.
El segundo UPS Business Monitor Latin America (BMLA), estudio realizado por UPS y dirigido por TNS Gallup, entrevistó a 580 ejecutivos de PyMEs en la región. Los últimos resultados del BMLA se centran en las prioridades del gobierno y las necesidades de inversión que tienen las PyMEs en la región. Así, muestran que poco más de un tercio de las PyMEs (36 por ciento) estableció que las actividades de comercialización son factores clave que necesitarán de un mayor desarrollo en los próximos 12 meses; seguidas muy de cerca por la tecnología informática con un 32 por ciento. Además, más de la mitad de los ejecutivos encuestados (55 por ciento) identifican al equipamiento y la infraestructura como su mayor prioridad de inversión.
“Según un informe reciente del Banco Mundial (World Bank Report), 55 por ciento de las empresas privadas en América Latina se quejan de que su país cuenta con infraestructura deficiente, lo cuál es un grave problema en comparación, por ejemplo, al 18 por ciento en Asia Oriental,” dijo el Presidente de UPS para las Américas, Stephen Flowers. “Aunque estas empresas reconocen que la mejora de su propia infraestructura aumenta su ventaja competitiva y fomenta su crecimiento económico, los líderes de negocios están totalmente convencidos de que sus gobiernos deben invertir más en la infraestructura del país.”
Cuando se preguntó a los ejecutivos de las PyMEs sobre las prioridades en las que deben enfocarse los dirigentes políticos, más de la mitad aseguró querer ver leyes ambientales más estrictas, Otra cuestión que resulta de interés para más de la mitad de los ejecutivos de las PyMEs es la promoción de la educación. Por último, 39% de los encuestados del estudio BMLA mencionaron que la reducción de la pobreza en todo el mundo es una cuestión clave. En relación a los resultados de las PYMES Argentinas entrevistadas, la principal prioridad se le asigna a la educación (56%), seguido de leyes ambientales más estrictas (49%) y reducir la pobreza mundial (40%) mención que comparte este tercer lugar en el ranking con asegurar la provisión futura de energía (41%).
Los países de América Latina necesitan abordar el tema de la pobreza de una manera más contundente para poder crecer y competir con China y otras economías dinámicas de Asia. Sus habitantes, lamentablemente, se encuentran con desventajas educativas desde el principio si consideramos las siguientes estadísticas reportadas por el Worldfund:
* La mayoría de los países de América Latina se encuentran detrás de otras economías competitivas del mundo – particularmente en las áreas de mejoramiento educativo.
* La tasa de graduación de la educación primaria es baja debido al alto índice de abandono escolar (65 por ciento) y la baja inversión en el rubro de educación en la región ($6.7 mil millones).
* Los altos niveles de desigualdad y falta de recursos (44 por ciento de la población vive con U$S 2 dólares al día) contribuyen a la falta sustancial de educación en las familias afectadas por la pobreza.
En comparación con otras regiones emergentes, como el este asiático, existe una disparidad entre la inversión y la calidad de la educación de América Latina. Los gobiernos regionales han aumentado el número de escuelas, pero poca inversión se ha destinado a mejorar los planes de estudios. Los países asiáticos están colocándose de manera constante entre los mejores en cuanto a resultados de las pruebas estandarizadas, mientras que los latinoamericanos siguen en la parte inferior. Además, en la India los estudiantes realizan exámenes de ingreso desde guardería, mientras que los estudiantes de América Latina pueden llegar a cursar su carrera educativa sin tener que realizar ningún examen de admisión.
Afortunadamente para América Latina, los ejecutivos de las PyMEs están conscientes de las problemáticas que enfrenta la región y están trabajando para mejorar la situación en sus propios países, comenzando con su campo de acción. Están elaborando y aplicando programas de responsabilidad social empresarial que tratan sobre la protección explícita del medio ambiente, programas de apoyo para la comunidad, programas de educación y de voluntariado, el apoyo de las organizaciones de la sociedad civil, y la contratación de proveedores con estándares éticos.
