Esta nueva colección, integrada por cuatro modelos en titanio y en dos versiones automáticas y dos en cronógrafo es una celebración del 30° aniversario de la trayectoria de Piaget junto a este deporte. Un diseño dinámico y un perfecto dominio de la técnica son palabras clave de la nueva generación de relojes Piaget Polo. La compañía ofrece en esta nueva colección una interpretación moderna de su ya legendaria colección, la cual se presentó por primera vez en 1979.
Manufacturados en titanio, una primicia para la marca, los modelos Piaget Polo FortyFive reinterpretan la estética original, en una caja hermética hasta 100 metros, prolongada por un brazalete de caucho inyectado. Ampliado a 45 mm de diámetro para seguir la tendencia actual, dimensión que también evoca la duración promedio de un partido de polo, la caja ha adoptado una nueva curvatura ergonómica que garantiza un óptimo ajuste sobre la muñeca. El fondo de cristal de zafiro descubre los movimientos íntegramente concebidos, desarrollados y producidos por la marca.
Además de presentar las funciones cronógrafo y Flyback, el Calibre 880P indica las horas, minutos y segundos -con un segundero pequeño a las 6 horas-, la fecha a las 12 horas y un segundo huso horario sobre 24 horas en las 9 horas. Dotado de dos barriletes y de un gran volante con tornillos de regulación, este movimiento mecánico de 5,6 mm de grosor y carga automática ofrece 50 horas de reserva de marcha en modo cronógrafo activado. Su cronógrafo de Alta Relojería está dotado de un embrague vertical.
El movimiento mecánico de carga automática 800P presenta la indicación de las horas y minutos, segundero central y fecha en las 6 horas. Dos barriletes garantizan una reserva de marcha de 72 horas mientras su volante espiral palpita con una cadencia de 21.600 alternancias por hora (3 Hertz), una frecuencia natural en la Alta Relojería.
La refinada arquitectura de este movimiento revela las hazañas técnicas y el savoir-faire de la compañía suiza. Los modelos actuales del Piaget Polo FortyFive se inspiran en el modelo histórico del Piaget Polo realizado en metales preciosos, para crear una línea audaz de titanio, acero y caucho con refinados acabados que juegan con los contrastes haciendo eco de los códigos genéticos de la colección.
