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Pisos de madera y de parquet: secretos y consejos de limpieza

Media Naranja, especialista en productos textiles de limpieza y con más de tres décadas de presencia en dicho mercado, conoce muy bien las necesidades de las amas de casa. Por ello, crea productos innovadores diseñados para satisfacer cada una de esas necesidades, simplificando así las tareas y el cuidado del hogar.

En esta oportunidad, brinda una serie de consejos para el cuidado de los Pisos de madera (1) y de parqué (2), los cuales requieren de atención especial para evitar rayarlos y lograr que siempre luzcan brillantes y como nuevos.

1) Pisos de Madera
Los revestimientos de madera para pisos, además de cálidos, son muy fáciles de mantener en perfecto estado y con una apariencia ideal. Pero más allá de su durabilidad y resistencia, son sensibles a la aparición de manchas o deformidades. Media Naranja, el especialista en productos textiles de limpieza, presenta algunas recomendaciones a los problemas más comunes.

Para limpiar y mantener pisos de madera y parqué, lo más recomendable es pasar la aspiradora luego de un barrido con una escoba suave. Después se recomienda limpiar la superficie con una mopa ligeramente humedecida en agua con vinagre o un trapo de piso de excelente calidad para que el líquido limpiador sea absorbido, deslizándose en forma homogénea por el piso sin rayar ni dejar vetas.

Por otra parte, no es recomendable limpiar los pisos con máquinas que desprendan calor y humedad, ya que pueden alterar las condiciones de la madera y del barniz. El uso de abrillantador debe ser esporádico.

Soluciones a problemas comunes
Es posible disimular rasguños superficiales sin necesidad de lijar la zona, utilizando un marcador de color madera para retocar, con el cuidado de seleccionar uno del color que más se asemeje al piso.

Si se ha producido una magulladura en la madera como consecuencia de un golpe o algo similar, es posible restablecer la uniformidad de la superficie aplicando sobre la zona (previamente limpia), una gotita de agua. Inmediatamente se aplica calor con la plancha, lámpara u otro aparato que dé calor. Esto hará que al humedecerse la madera se dilate y recupere el volumen original.

Los suelos barnizados con un producto de calidad suelen mantenerse en buen estado por muchos años. No obstante después de 7 u 8 años puede ser el momento de pasar lijadora y volver a barnizar.

2) Cuidados y limpieza del parqué
Al igual que los pisos de madera, los suelos de parqué, hoy tan difundidos y utilizados en las construcciones, tienen también algunos trucos y consejos que vale la pena conocer para cuidarlos y lograr una excelente limpieza diaria sin esfuerzos. Media Naranja conoce bien estos secretos y por eso recomienda.

En primer lugar se debe recordar que el exceso de humedad resulta perjudicial, ya que no sólo puede llegar a deformar las piezas de madera, sino que además es posible que aparezcan manchas oscuras en la zona afectada. Por eso se debe prestar especial atención, por ejemplo, a si hay un escape de agua en la cocina o en los sanitarios. Si esto sucede, se debe impedir en lo posible que llegue al parqué, o secarlo rápidamente si ya se ha mojado. En cualquier caso nunca se debe permitir que permanezca mojado.

Asimismo, una limpieza mal realizada puede dañar al piso. Como primer dato nunca debería usarse agua en exceso, sino un trapo de piso húmedo de calidad premium es más que suficiente. Y si se derrama algún líquido sobre el parqué lo ideal es secarlo inmediatamente con un paño limpio de excelente absorción, sin dejar que se seque sobre la madera; pues posiblemente acabe filtrándose en ella, problema especialmente grave con líquidos de color como por ejemplo vino o café.

Pero no sólo la humedad afecta al parqué, sino también el exceso de sequedad en el ambiente, que puede resultar igualmente perjudicial para la madera. Los cambios en la humedad ambiente provocarán expansiones y contracciones en el piso que pueden acabar dañándolo. Si el ambiente es excesivamente seco, es conveniente plantearse instalar un humidificador. Un truco que puede ser muy útil para conseguir ese mínimo de humedad es ducharse con la puerta del baño abierta, con el objetivo de que parte del vapor de agua salga del baño extendiéndose por toda la casa.

Un tema primordial para el cuidado básico es poner especial atención al calzado diario. Es recomendable no caminar sobre él con el calzado de calle, ya que en la suela puede traer suciedad, lo que puede dañarlo inadvertidamente. Además, los zapatos con tacos muy finos tampoco son aconsejables.

Para evitar rayas en el piso provocados por mover los muebles, es de vital importancia colocar tiras de fieltro bajo las patas de las sillas, mesas, sillones, etc., en general bajo toda pieza de mobiliario susceptible de ser movida con cierta frecuencia.

Debería evitarse también la incidencia directa del sol ya que acelera su deterioro.

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