Bajo el slogan “Salta, tan linda que enamora”, el gobierno salteño presentó la temporada de verano 2010, en la que se destaca la amplia oferta turística y de servicios que posicionan a la provincia como destino nacional e internacional por excelencia.
En el último año, Salta incrementó en un 7% su capacidad hotelera, que alcanza las 14.700 plazas. La incorporación de nuevas rutas áreas hacia Santa Fe y Mendoza se sumarán desde este verano a las que unen Salta con Iguazú, Córdoba, Capital Federal y Santa Cruz de la Sierra (Bolivia). Esas son algunas de las estrategias implementadas para posicionar a Salta como destino turístico este verano.
“El gobierno está trabajando con los municipios, otorgando incentivos impositivos al sector privado y créditos subsidiados porque queremos desarrollar nuevos circuitos turísticos, más allá de los ya conocidos como Cafayate, Cachi o Salta capital para sumar nuevos atractivos a nuestra propuesta”, señaló Federico Posadas, ministro de Turismo y Cultura de Salta, durante la presentación realizada hoy en la Feria Internacional de Turismo (FIT).
Cada año, la provincia recibe 1.200.000 turistas, la mitad de ellos extranjeros, a quienes se les ofrece desde paisajes áridos como el desierto puneño hasta el verde exuberante de la selva, pueblos cargados de historia, gastronomía autóctona, y la oportunidad de descubrir la cultura y la tradición del noroeste del país.
Los Valles Calchaquíes, que sorprenden por las formaciones rocosas de sus quebradas y cerros multicolores y sus pueblos con construcciones típicas; y valles y quebradas para disfrutar mientras se practica rafting, cabalgatas, trekking, cannopy, travesías 4×4 y mountain bike son algunos de los atractivos que ofrece la provincia para vivir unas vacaciones de verano diferentes.
Con esta campaña, Salta busca diferenciarse de otros destinos por la calidad de su oferta. Una estética moderna, tonos cálidos e imágenes impactantes y representativas, se combinan con el protagonismo de la gente, convocando vivir sensaciones y sentimientos que Salta despierta como ninguna otra provincia del país.
