Pese a los recortes en el suministro de gas y electricidad en las automotrices y en sus proveedores autopartistas -que derivó en faltante de piezas a la hora del ensamble-, la producción de vehículos llegó el mes pasado a 47.573 unidades, un 32,7% más que en igual período de 2006, convirtiéndose en el mejor junio en la historia de la industria automotriz, informó ayer la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa). La fabricación acumula en el primer semestre un incremento del 30,2%, con 231.887 unidades.
“La producción crece por el fuerte aumento de las demandas interna y externa, a partir de las importantes inversiones de las empresas terminales en la renovación de oferta de productos”, señaló a la agencia Télam el director ejecutivo de Adefa, Fernando Rodríguez Canedo. Consultado sobre el abastecimiento de energía al sector, indicó que “es necesario para los actuales planes productivos que se tomen algunas medidas acordes con las propias necesidades y las generales”.
Algunas terminales ya habían invertido para casos de emergencia en plantas de gas propano, en reemplazo del gas natural, y en generadores eléctricos a gasoil, para sustituir el suministro de la red. Las que carecen de esos equipos debieron trabajar de noche y no pudieron operar las 24 horas, como tenían planeado. Además, las terminales se vieron afectadas por la falta de piezas de algunos proveedores afectados por los cortes de gas.
La exportación también alcanzó otro récord al registrar un avance del 36,6%, mientras que las ventas de las terminales a concesionarios -incluidos los vehículos nacionales e importados- crecieron un 22,2%. En los primeros seis meses se exportó un 30,9% más y se incrementaron las ventas locales un 20,2 por ciento. La exportación acaparó un 57,1% de lo fabricado.
El listado de destinos externos fue encabezado por Brasil, con la compra de 67.969 unidades; seguido por México, con otras 20.569 unidades, y el resto de América, con 9121 vehículos. En total se vende a 81 países, frente a los menos de 30 en 2001.
