Terranova deslumbra y De Villiers gana terreno

    Al verse alejado de la pugna por la general, Orlando Terranova se ha permitido el lujo de atacar al máximo entre Iquique y Uyuni hasta embolsarse su tercera victoria de etapa. Por su parte, Giniel de Villiers araña tres minutos a Nasser Al-Attiyah y aumenta la presión sobre el catarí.

    Orlando Terranova maldecirá para siempre la cuarta etapa del Dakar de 2015, en la que quedó fuera de la lucha por la general a pesar de haber marcado un ritmo frenético con el que podría haberse alzado perfectamente con la victoria en Buenos Aires. La victoria de hoy, la tercera ya tras seis etapas de competición, ha borrado de un plumazo cualquier género de duda acerca de la velocidad del piloto de Mini en su llegada a Uyuni. Cabe decir que el principal aspirante, Yazeed Al-Rajhi, tenía bastante con defender su tercera posición de la general. Tras ser segundo a 2’20’’ del vencedor, el saudí ha cumplido con creces su cometido e incluso ha logrado arañarle segundos al líder de la general. Lo mismo puede decirse de Bernhard ten Brinke y Krzysztof Ho?owczyc, quienes, en una batalla sin cuartel por la 4ª posición de la clasificación provisional, han ofrecido un auténtico recital y han entrado a menos de tres minutos del ganador de la etapa.

    A 6’50’’, Giniel de Villiers también puede sentirse orgulloso de la jornada de hoy. El sudafricano ha logrado pulverizar los tres minutos que lo separaban de Nasser Al-Attiyah. Las cuentas le han salido perfectas a De Villiers, que de esta manera impide que el piloto de Mini se relaje; por su parte, el catarí confesaba en la meta que el mal de altura le había jugado una mala pasada y que se había visto obligado a detenerse en varias ocasiones a lo largo de la especial. Muy rápido desde el principio, Stéphane Peterhansel acaba la etapa en un decepcionante 8º puesto, a diez minutos del vencedor y cinco segundos por delante de Robby Gordon.

    En camiones, Aleš Loprais ha rubricado su mejor actuación desde el comienzo del rally y ha dominado con mano firme la séptima etapa, con una ventaja de más de cinco minutos sobre Gerard de Rooy al volante de su Man. Esta proeza le ha valido remontar hasta el cuarto escalón de la clasificación general, en la que los contratiempos sufridos por Eduard Nikolaev han hecho estragos. Su compañero de equipo en Kamaz, Airat Mardeev, sexto en Iquique, ha aprovechado la situación para hacerse con las riendas del rally.