En general, las cremas de enjuague favorecen el desenredo del pelo, le dan brillo y volumen. Existen muchas diferentes clases o tipos de cremas de enjuague.
Es importante conocer los diferentes tipos que existen para que a la hora de elegir el producto se opte por el más adecuado, de acuerdo a las necesidades del cabello.
– Las que se enjuagan: son las que se usan después del champú y se dejan actuar unos minutos antes del enjuague. Las más suaves son ideales para cabellos finos. Las que tienen propiedades humectantes contienen algunos ingredientes especiales que hidratan e impiden que el pelo pierda la humedad.
– Champú y acondicionador, juntos: están elaborados para que los ingredientes acondicionadores permanezcan y se barra solo la suciedad.
– Las que no necesitan enjuague: se aplican cuando el pelo está húmedo. Desenredan y dan brillo. Las espumosas son los más recomendadas para las personas que tienen pelo fino. También se pueden usar como complemento, para dar más brillo, de las cremas de enjuague comunes.
– Tratamientos con aceites hidratantes: brindan suavidad y dejan el pelo sedoso. Son ideales para cabellos secos y porosos porque dejan que los nutrientes penetren en el cabello.
– Las reestructurantes: están elaboradas para que penetren en el pelo fortalezcan la estructura capilar. Es un producto que no necesita enjuagarse, y por esta razón sus componentes actúan durante más tiempo en la fibra capilar consiguiendo así un resultado espectacular en muy poco tiempo. Se recomiendan a las personas con pelo muy seco o castigado por permanentes, tinturas u otras agresiones capilares como brushing, planchado y rayos UV.
– Geles para proteger las puntas: existen enjuagues que se usan exclusivamente para fortalecer las puntas que están abiertas o muy secas.
– Para proteger el color: son elaborados sin ingredientes agresivos que puedan alterar el color. Muchos contienen pantalla solar, por eso se recomienda su utilización antes de exponerse al sol.
