Son 40 locales sobre Santa Fe junto al Puente Pacífico. El predio mide 12 metros por 50, tiene puestos de 4 y 8 metros cuadrados y una habilitación provisoria. Un grupo de vecinos juntó firmas para que no la permitan. Y el dueño dice que es legal.
La inauguración, a metros del puente Pacífico, de una “Saladita” con pequeños cubículos divididos por tabiques de durlock, en los que se vende ropa y otros productos a precios económicos, ha generado fuerte polémica en Palermo.
La feria tiene unos 12 metros de frente por 50 de fondo donde se instalaron cerca de 40 locales de entre 4 y 8 metros cuadrados, junto a un baño para caballeros y otro para damas. Está sobre la avenida Santa Fe, entre Juan B. Justo y Godoy Cruz, una cuadra de gran movimiento durante todo el día porque es un área de trasbordo entre el ferrocarril San Martín, el subte D y muchas líneas de colectivo.
Lo de “Saladita” viene por la enorme feria del partido de Lomas de Zamora “La Salada”, donde se vende mercadería que reproduce la de las primeras marcas, y a otras más pequeñas que proliferan en la Ciudad. Sin embargo, quienes trabajan allí rechazan ese nombre y dicen que tienen habilitación y todos los papeles en regla.
La controversia viene desde hace varios meses e incluso una asociación vecinal, identificada como Defendamos Buenos Aires, juntó firmas contra el emprendimiento en el barrio, apenas corrió el rumor de sus características.
Ante una consulta de este diario, en la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad dijeron que el lugar funciona con una habilitación provisoria y que en estos días se hará una nueva inspección en la cual el predio sería clausurado , por motivos que oficialmente no supieron explicar. En el GBA, la legislatura bonaerense prohibió el mes pasado por 90 días la habilitación de nuevas ferias ante la avalancha de pedidos.
“Esto es una galería comercial, no es una Saladita. Se hablaron muchas pavadas de este lugar. Se decía, por ejemplo, que iban a venir micros con tours de compras, como en La Salada. Decime cómo vamos a hacer eso si sobre esta cuadra de Santa Fe ni siquiera se puede estacionar”, dijo a este diario un hombre que se identificó como Daniel Fernández y se presentó como uno de los dueños del emprendimiento, inaugurado hace menos de un mes.
El hombre aseguró que no se acepta en el lugar la venta de mercadería trucha y, en una recorrida por el lugar, mostró que la mayoría de los locales tienen pegado sobre el vidrio el cartelito proporcionado por la AFIP, que invita a los clientes a exigir “siempre su factura”.
Clarín comprobó que no se vende ropa identificada con marcas conocidas, aunque los precios están lejos de los de otras áreas comerciales de la avenida Santa Fe: un par de medias se consigue por 7 pesos y un calzoncillo boxer, por 15. También hay una peluquería unisex, locales de lencería femenina, uno de accesorios para celulares, otros de bijouterie y hasta la oficina de un abogado.
Según explicaron, los alquileres comienzan desde los 800 pesos mensuales y van hasta los 1.600 en los locales más grandes, en una zona de Buenos Aires donde el alquiler de un local a la calle no baja de los 8.000 pesos.
El dueño del emprendimiento contó que el terreno es ferroviario (está a pocos metros de las vías) y que él se lo alquiló por tres años a la UGOFE, el ente que administra el la línea San Martín.
Fernández mostró los matafuegos en las columnas y aseguró que la pintura es ignífuga. “Ahora que inauguramos –aseguró– los vecinos vienen a comprar”.
