Las concesionarias negocian con el Ministerio de Producción los detalles de un plan mediante el cual buscarán evitar el derrumbe en la venta de automóviles usados.
La iniciativa, que se lanzará oficialmente en el transcurso de marzo, contempla la provisión de líneas de créditos de entre $10.000 y $15.000 a tasas blandas del 11 por ciento. Los usados comenzaron el año con el pie izquierdo: en enero la venta cayó 21% respecto al mismo mes de 2008.
De la propuesta tomarán parte aquellas concesionarias que aparezcan ingresadas en la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). “Planteamos una medida similar a la contemplada por el Gobierno para la compra de vehículos 0 kilómetro”, precisó a iProfesional.com Alberto Príncipe, titular de la Cámara de Comercio Automotor (CCA).
El representante señaló que los concesionarios “intercambiaron información con el Ministerio de la Producción para que la preocupación del sector cobre relevancia”.
“Ahora se está evaluando la compatibilidad de nuestra propuesta con lo fijado para el plan de 0 kilómetros. Esperamos una respuesta ágil porque la venta de usados, tal como está la cosa, podría colapsar en el corto plazo”, indicó.
Príncipe sostuvo que las concesionarias ya comenzaron a notar los efectos de la crisis. Y que la coyuntura negativa podría impulsar cierres y despidos abultados.
“Como las ventas dejaron de estar en un volumen razonable, muchos negocios caerán en la inactividad. Nadie puede mantener un emprendimiento si no hay movimiento, por lo que los desempleos comenzarán a crecer rápidamente si esto no cambia”, expresó.
Respecto de las repercusiones de la iniciativa impulsada por las concesionarias, iProfesional.com tomó contacto con fuentes vinculadas con la Asociación de Fábricas de Automotores de Argentina (ADEFA) y la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), quienes evitaron pronunciarse “por el momento” aunque dieron a entender que sabían de la existencia del plan.
Derrumbe
Príncipe sostuvo que “el año comenzó de la manera más complicada para la venta de usados”. Según el titular de la CCA, en enero se comercializaron 105.000 vehículos contra los 133.000 que se transfirieron en el primer mes de 2008.
“El panorama es preocupante: la baja ocurrió en enero, que es cuando por lo general más ventas ocurren. El verano es una estación clave para la comercialización de usados, y por lo general la gente compra en diciembre para patentar en enero. Bueno, eso sucedió mucho menos en esta oportunidad”, dijo.
El representante comentó que “este tipo de freno son comunes a marzo, por la vuelta a clases y la decisión del cliente de recuperar lo que invirtió en sus vacaciones, pero no para esta época”.
Para Príncipe, la baja en la comercialización de autos usados repercutirá directamente en el éxito del plan de incentivo a la compra de vehículos nuevos que promueve el Ejecutivo. “Si no se mueven los usados, entonces también se frena la demanda de 0 Km. Un consumo incentiva al otro”, apuntó.
Meta difusa
El titular de la CCA explicó que “lanzar un plan de créditos permitirá, cuanto menos, mantener el nivel de ventas del 2008”. La venta de usados totalizó 1.410.000 operaciones el año pasado, y evidenció un incremento de 2,6% respecto de 2007.
Si bien la cifra total fue la mayor en nueve años, y se duplicó la cantidad respecto a las ventas concretadas en 2001 y 2002 (600.000 vehículos), el balance anual dejó un sabor agridulce a los concesionarios.
¿El motivo? A principios de 2008 el sector pensaba vender un 15% más que en 2007, ya que los pronósticos coincidían en señalar que se iba a superar por lejos el millón y medio de unidades vendidas.
Con relación a los distritos que concentraron la mayor cantidad de ventas, Buenos Aires encabezó las estadísticas 2008 con 538.179 unidades transferidas.
A ese territorio le siguió Capital Federal (176.402 usados vendidos), Córdoba (170.475), Santa Fe (133.027) y Mendoza (85.227).
Como contracara, La Rioja (4.880), Catamarca (4.949) y Formosa (5.398) acumularon la menor cantidad de operaciones.
Precios
Por último, Príncipe se refirió a las oscilaciones en los precios de los usados. “La caída en las ventas tuvo su impacto en los precios. Bajaron para la compra, pero hay una cuestión a tener en cuenta: el auto del común de la gente también vale menos. Eso es algo que muchos no toman en cuenta antes de colocar el vehículo a la venta”, señaló.
“Los autos usados hoy tienen una baja en los valores del 15%. Poco a poco, se volvió a los precios que estaban vigentes antes de la devaluación”, concluyó.
