Coface, el grupo francés líder en seguro de crédito y servicios de credit management, anunció que el riesgo país de Brasil se mantiene moderadamente alto (A4). A pesar de que el consumo privado vuelve a ser el principal motor de la actividad y de la mejor gestión pública, el endeudamiento país sigue siendo demasiado elevado.
El dinamismo de una parte de los sectores exportadores, a pesar de la elevada cotización del real, asegura importantes excedentes comerciales y corrientes, lo que implica una fuerte baja de la necesidad de financiamiento exterior, cubierta en abundancia por las inversiones directas extranjeras. No obstante, a pesar de la mejor gestión, el endeudamiento público sigue demasiado elevado (75% del PBI bruto y 50% del PBI neto).
A pesar de un crecimiento moderado y de que ciertos sectores deben enfrentarse a dificultades específicas en este ambiente más favorable, la solvencia de las empresas mejora en su conjunto.
Las empresas se benefician de tesorerías saneadas, especialmente en los sectores más atractivos, la industria azucarera y papelera, así como en la construcción, la siderurgia, los equipos electrónicos y la industria aeronáutica. Por el contrario, no sólo la confección y la zapatería, sino también los productores de trigo y de soja, sufren una competencia exterior exagerada por la valorización del real. Su comportamiento de pago podría debilitarse. En cambio, el sector del automóvil se sitúa en una posición intermedia, beneficiándose de un mercado dinámico, pero con una mayor competencia en la exportación.
