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Consumo: cuáles son las gustos que la clase media no está dispuesta a ceder

La crisis dejará un cambio importante en el consumo. Después de varios años donde los gastos excesivos le ganaron a la razón, hay una vuelta de tuerca antes de tomar una decisión de compra la gente “lo piensa dos veces”.

Para los expertos este cambio es más notable en los integrantes de la clase media, quienes admiten que ya no se justifica gastar de manera excesiva en indumentaria o salir los fines de semana a cenar, ir al cine y tomar algo, todo en una sola ocasión.

Sin embargo, los recortes tienen un límite, que es dejar un lugarcito para la satisfacción. Entonces, aparecen un sinfín de herramientas para lograrlo, pero de manera más económica.

La mejor opción
“A pesar de la crisis, una de cada cuatro personas dice haberse dado un gusto en alguna de sus compras en los últimos seis meses. Y sólo uno de cada 10 dice que lo que gastó fue excesivo en relación con sus ingresos”, destacó Silvina Neder, directora de la consultora Neder.

Según una investigación que llevaron a cabo en la compañía, para lograrlo, los argentinos recurren a diferentes estrategias. “Hace dos años se apreciaba la comodidad, por eso se elegían los hipermercados. Ahora, se camina lo necesario para buscar precio, eso es prioridad para los consumidores”, explicó Neder.

También Vicente Lourenzo, de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), admitió que hoy el consumidor camina y busca ofertas.

Lo cierto es que la clase media incorporó otras prioridades en su administración cotidiana, y aquellos gastos “irreverentes” que marcaron la economía de sus bolsillos, hasta el año pasado, ahora fueron reemplazados por gastos más racionales.

De esta manera, acceden a lo que desean que les brinde satisfacción, siempre que sea lo necesario y no resulte desmedido.

En este contexto, las gratificaciones más comunes entre la población, que dispone de algunos recursos y que no están dispuestas a ceder, son:

* Viajar, aunque quizás con menos frecuencia
* Comprar alimentos gourmet
* Practicar deportes
* Asistir a un gimnasio

Estos gustos están casi siempre dentro de las posibilidades y en línea con los ingresos de quien compra.

Por el contrario, los electrodomésticos, insumos para auto y electrónica, son gustos más exclusivos. Quienes se tientan en estos rubros suelen gastar fuera de sus posibilidades, es decir, en una relación desproporcionada con sus ingresos.

Priorizando las comodidades
En otra investigación, la consultora indagó sobre los gastos acumulados por las familias a junio de 2009. En la misma, un 87% admite que este año gastaron igual o más en TV por cable, teléfono celular e Internet; seguido por un 76% que declaró lo mismo en lo que corresponde al uso del auto y servicio doméstico.

El tercer lugar lo ocupan los segmentos destinados a verse mejor y la salud, desde peluquería a gimnasio, donde la gente busca mantener sus costumbres.

Tendencia por sexo
Hombres y mujeres están dispuestos a ahorrar si es necesario, pero cada sexo tiene prioridades a la hora de elegir. Dentro de lo que no están dispuestas a ceder, las mujeres se exceden algo más que los hombres al comprar insumos para deportes o hobbies; mientras que ellos son tentados por el auto y la electrónica.

Estas preferencias van atadas a otras menos frecuentes, pero que no desaparecieron, ya que un 60% se dio el gusto y viajó dentro del país.

En cuanto a los gastos que se realizaron pero limitados, sólo lo necesario, lideran el ranking los electrodomésticos, seguidos por electrónica. Luego se ubicaron la ropa y los productos de cuidado personal.

Compras básicas
Para acceder a las necesidades básicas también hubo cambios, ya que el 70% de los consumidores camina para encontrar mejor precio en alimentos y sólo un 20% termina optando por marcas más baratas.

“También vemos una gran valoración del uso de las tarjetas de crédito. Sin embargo, sólo un 3% considera que éstas le ayudan a ahorrar dinero”, explicó Neder.

Perspectivas
Si bien se reconoce un cierto cambio de hábito y búsqueda de ahorrar, los comerciantes sostienen que lo peor de la crisis ya pasó, y que a partir del último trimestre habrá mejores expectativas.

Según Lourenzo, agosto es un mes visagra. Pero a partir de septiembre el escenario es más alentador, y se espera una recuperación importante para verano.

También los datos de consumo de Nielsen muestran un crecimiento durante el último mes, revirtiendo la tendencia de la primera parte del año.